Siri Hustvedt tilda su nuevo libro de "comedia feminista"
La escritora presentó ayer su última novela, 'el verano sin hombres' Narra la historia de Mia a partir del día en que su marido le pide una pausa en su longevo matrimonio
Barcelona. La autora estadounidense Siri Hustvedt (1955) reconoce que "fue un placer" escribir su última novela, El verano sin hombres, un título protagonizado por mujeres, que ayer tildó una comedia clásica y feminista, en la que también trata sobre el poder de la imaginación.
Acompasando sus palabras con constantes movimientos de sus huesudas manos, la escritora presentó en Barcelona su nuevo libro, éxito de ventas y de crítica en varios países de Europa, acompañada por los editores de Anagrama Jorge Herralde y de la editorial que la publica en catalán, Empúries, Eugènia Broggi, aseveró, contundente, que se trata de una "ficción total".
La obra se inicia cuando la poetisa Mia Fredricksen, de 55 años, enloquece porque su esposo Boris, con el que lleva casada tres décadas con fidelidad absoluta por ambas partes, le pide una pausa en su matrimonio al haber aparecido otra persona en su vida, una compañera de trabajo mucho más joven y bien dotada que ella. Siri Hustvedt, que está casada con el también reconocido escritor Paul Auster, lamentó, incluso con una punta de enfado, que escriba lo que escriba siempre se le acabe preguntando sobre qué hay de ficción y qué hay de realidad en sus relatos. "Estoy harta -subrayó- de que siempre piensen que soy la protagonista de mis libros. No sé si se le hace la misma pregunta a un hombre que escribe. Pero yo no soy Mia".
"Tengo mucha imaginación -precisó la escritora- y para mí es muy fácil imaginar personajes y sus personalidades. Aunque sí es cierto que todo lo que escribo debe tener una verdad emocional".
Hustvedt comentó que lo pasó muy bien durante todo el proceso de escritura de la novela, dándole a la historia un tono cáustico e incluso cómico en algunos de sus pasajes y, especialmente, buscando y encontrando la voz de Mia. En ese sentido, cuando tuvo claro cómo debía ser esta mujer entendió que tenía una nueva novela, que se inicia con la frase: "Poco tiempo después de que él dijera la palabra pausa me volví loca y tuvieron que ingresarme".
comedias clásicas A su juicio, después de La mujer temblorosa, una suerte de memorias neurológicas, la historia que presentó ayer es como las comedias clásicas de la época de Shakespeare o como las míticas películas en blanco y negro protagonizadas por Cary Grant, como por ejemplo La pícara puritana. Aunque la trama "sea algo banal e incluso trivial, con un hombre que deja a una mujer, unas adolescentes crueles y deshonestas, y unas mujeres mayores que viven en una residencia, la protagonista va transformando el decorado con su imaginación".
Siri Hustvedt mantuvo el argumento de que la imaginación es un ingrediente que puede permitir cambiar a las personas. "El poder de la imaginación -afrimó- es el que permite ir hacia espacios del pasado y del futuro y convertir a las personas en alguien diferente a lo que son".
Asimismo, defendió que ha construido una novela feminista, en la que el personaje principal, Mia, descarga toda su rabia contra la neurobiología y la diferencia entre sexos, pero en la que también aparecen las complejas relaciones que establecen las chicas en su adolescencia o cómo viven el final de sus vidas un grupo de viejecitas.
Por otra parte, de forma intencionada, la escritora presenta un final abierto, en el que no se sabe cómo volverán a ser las relaciones entre Mia y Boris después del verano en el que han vivido separados. "En mi cabeza -indicó- vuelven a juntarse, pero nada será igual que antes".
Nacida en Minnesota, de padres noruegos, Siri Hustvedt tiene publicadas varias novelas en España como Todo cuanto amé, que trata de la amistad entre un historiador del arte y un artista, y Elegía para un americano, que narra cómo unos hermanos se enfrentan al pasado de su familia.