- La complacencia ya no es admisible ni frente a Rusia ni dentro de la Unión Europea, dijeron varios líderes europeos en el Foro Económico Mundial de Davos, donde hicieron hincapié en que hay que dar respuestas claras a las expectativas de los países que están esperando ser aceptados en el bloque comunitario.

“Tenemos que ser muy precisos en cómo abordamos el deseo de acceso de Ucrania, y el de Georgia y Moldavia, en los próximos tres o cuatro meses”, dijo el primer ministro de Países Bajos, Mark Rutte, durante una mesa redonda sobre la unidad de Europa en un contexto de desorden global.

A ese respecto, comentó que se espera que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, sea “brutalmente sincera” con los miembros de la UE en cuanto a los pros y contras de estos tres países.

Rutte agregó que ese debate no se puede aislar de la petición de adhesión de los países de los Balcanes occidentales y de la estabilidad en esa parte de Europa.

“No debemos dar plazos de décadas, pero los nuevos países deben aceptar nuestros principios y reglas, y en este caso les ayudaremos, pero hay que cumplir los requisitos”, comentó en el mismo panel el primer ministro de Eslovaquia, Eduard Heger.

El primer ministro irlandés, Micheal Martin, declaró que la Unión Europea no puede mostrarse complaciente con situaciones en las que los Estados pretenden ejercer el control de los medios u obstaculizar su trabajo cuando no siguen la línea que desean; o cuando persiguen a ciertos grupos, como los LGBT.

“Estas son acciones inaceptables para un Estado de la UE y no podemos aceptarlo”, declaró el jefe del Gobierno irlandés. Sobre esta misma cuestión, la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, dijo que “principios” como el Estado de Derecho “hay que tomarlos seriamente”, en comentarios en los que no se hizo alusión directa a Polonia o Hungría, dos países con respecto a los que existe preocupación en Bruselas por sus políticas contra la libertad de prensa y ciertos grupos de la sociedad.

“Yo quiero mantener a todos los países dentro”, comentó, aunque reconoció que la guerra en Ucrania y la respuesta a Rusia han dejado en evidencia que hay grietas en la unidad de los países comunitarios.

Metsola sostuvo que la Unión Europea tendrá que tomar en el corto plazo decisiones sobre su ampliación hacia países que han trabajado para ponerse a la altura de sus valores y que ahora están luchando por los principios que defiende el bloque. “De esas decisiones dependerá su capacidad de mantenerse unida” la UE, opinó.

“Si estamos dispuestos a decir sí, no se trata solo de economías y números, ni a dónde va el poder de tal o cuál institución, se trata de si la UE quiere ser un poder democrático global en un vecindario en el que tenemos a un adversario común”, comentó en el Foro de Davos.

“Creo que responderé a esta pregunta diciendo que ha llegado el momento de afrontar decisiones cruciales, la próxima semana y en los meses que vienen. Mantener esa unidad dependerá de que seamos capaces de tomar las decisiones que se esperan de nosotros”, agregó.

En otro pasaje, Metsola lamentó que en el pasado no se haya reaccionado a los “chantajes” y “amenazas” de Rusia contra la UE. l