- La Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa instó ayer a Turquía a garantizar la separación de poderes y la independencia judicial ante la “degradación constante” de la situación en el país.

Su resolución expresó la “grave preocupación” de la Cámara tanto por “la falta de independencia del poder judicial y de garantías suficientes para la separación y equilibrio de poderes” como por “las restricciones a la libertad de expresión y de los medios”. Constató además “la interpretación abusiva de la legislación contra el terrorismo, la no ejecución de las sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) y las restricciones a la protección de derechos humanos, derechos de las mujeres y políticos”.

El texto fue adoptado por 89 votos a favor, 16 en contra y 23 abstenciones. Ninguna de las cuatro enmiendas presentadas por la delegación turca fue aprobada.

La resolución exhortó a las autoridades turcas a renunciar a las leyes antidemocráticas, revisar su marco constitucional, restablecer la libertad de expresión, interpretar su legislación antiterrorista de manera más restrictiva y ejecutar los fallos del TEDH.

Solo los parlamentarios turcos y azerbayanos defendieron a las autoridades turcas.

El diputado Halil Ozsavli, del partido presidencial AKP, justificó la disolución del HDP por sus lazos con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), al que tachó de “organización terrorista”. “El PKK y HDP tiene una relación mucho más solida que ETA y Batasuna, que fue disuelta por la presión de la sociedad”, dijo.

Los ponentes del informe, el conservador británico John Howell y el socialista sueco Thomas Hammarberg, expresaron su “total acuerdo” en las críticas por la situación turca. “Todos estamos en contra del terrorismo”, dijo Hammarberg, “pero como señala la resolución se restringe aún más las actividades de las ONG y la libertad de asociación en nombre de la lucha antiterrorista”.