- Reino Unido, retirado oficialmente de la UE el 31 de enero, está determinado a que su futura regulación posbrexit en materia financiera esté guiada por lo que sea beneficioso para el país, pero confía en alcanzar con la UE una “equivalencia” que sea satisfactoria para ambas partes, según un documento del Gobierno británico remitido al Parlamento.