Los estudiantes de la UPV/EHU han sumado un invitado sorpresa a los nervios previos a los exámenes del segundo cuatrimestre. Apenas quedan seis días para que los alumnos comiencen a examinarse y en el campus de Donostia, concretamente en el centro Carlos Santamaría, desde hace dos semanas, el inesperado invitado viste guante blanco. Los estudiantes denuncian que, en este tiempo, una oleada de robos ha sacudido la biblioteca donde cada día, decenas de alumnos se preparan para el maratón de exámenes que les viene las próximas semanas. El objetivo es siempre el mismo: ordenadores portátiles que durante unos minutos han quedado sin vigilancia por parte de sus dueños.

En los últimos días, al menos cinco alumnos, aunque podrían ser más, han sido víctimas de los ladrones, que se desconoce si son estudiantes de la universidad o personas de fuera que aprovechan lo concurrida que está estos días la biblioteca para hacerse con su botín.

Así lo confirman a este periódico alumnos de las facultades de Derecho, Magisterio y Antropología del campus de Gipuzkoa. La noticia es vox populi en el campus. “Lleva varias semanas pasando y no es la primera vez”, cuentan con sus portátiles encima, recordando que “justo antes de la pandemia” también desaparecieron ordenadores.

La Universidad también confirma los hechos: "Es cierto que ha aumentado el robo de pertenencias", aseveran fuentes de la UPV/EHU, que señalan que se ha pedido a los alumnos que redoblen la vigilancia de sus pertenencias mientras el equipo de seguridad de la universidad investiga lo ocurrido.

Al parecer, hay en torno a una decena de afectados. Y más allá de la pérdida económica, para los alumnos supone una faena mayúscula, ya que la mayoría guarda en sus ordenadores los trabajos y apuntes de todo el cuatrimestre, un material difícilmente recuperable en vísperas de los exámenes.

Por eso, en los últimos días la vigilancia se ha redoblado sobre estos aparatos y ya no queda nadie que salga a fumar o vaya a la cafetería sin sus mochilas encima (estos pequeños descansos parecen ser el momento escogido por el ladrón o los ladrones para actuar). “Nos dijeron por megafonía que la Universidad no se hacía responsable de los robos”, cuentan los alumnos, que no obstante, sí señalan que la UPV/EHU ha reforzado la seguridad en la biblioteca: “Ayer -por el lunes- había dos personas de seguridad todo el día por aquí cuando nunca hay nadie”.

La Ertzaintza también se ha puesto manos a la obra. Por el momento, la Policía vasca está trabajando sobre cinco denuncias presentadas el pasado jueves, día 5, por estudiantes a los que se les habían sustraído el ordenador en la cafetería. “Se está trabajando en la resolución de estos hechos”, confirman fuentes policiales, que explican que se está llevando a cabo el visionado de las imágenes de seguridad del centro al mismo tiempo que se investiga si alguno de los objetos robados ha sido puesto a la venta. Por el momento, no se ha producido ninguna detención relacionada con estos hechos.