Los vecinos residentes en el barrio Garagartza de Mendaro apenas pudieron pegar ojo durante la pasada noche. Las intensas lluvias de los últimos días y las numerosas experiencias anteriores hacían presagiar el desbordamiento del río Kilimon (afluente del Deba), lo que finalmente se produjo pasadas las 4.00 horas de la madrugada. Esa circunstancia, unida al hecho de que las alcantarillas no pudieron absorber toda la cantidad de agua que estaba dejando el temporal y a las enormes cantidades de agua que bajaban de los montes colindantes, provocó que la calle Garagartza quedara totalmente anegada (se midieron hasta 30 centímetros).

Como consecuencia de esa suma de factores, el agua entró en los portales de los números 7, 9 y 11 de la calle Garagartza (en el número 9 también se inundó el foso del ascensor).

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En cualquier caso, la peor parte se la llevaron los vecinos del número 1 de la calle Trinidad, que confluye con la calle Garagartza. Según explicó Luis Mendikute, que reside en esa casa desde hace veinte años, "el agua ha llegado unos 80 centímetros de nuestra fachada y ha entrado en casa causando daños, principalmente, en el local en el que tenemos la lavadora, la secadora y la madera para calentar la casa en invierno".

El propio Luis reconoció que no es la primera vez que les toca vivir algo similar, por lo que estaba preparado: "para la una de la madrugada ya estaba en la calle y aunque antes habíamos movido las cosas por si entraba el agua, al final ha alcanzado algunos electrodomésticos y la leña que teníamos apilada".

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Responsables del cuerpo de bomberos presentes en el barrio mendaroarra explicaron a este periódico que habían pasado "toda la noche intentando achicar el agua de la calle Garagartza" en un intento de minimizar los daños "muy difícil porque venía agua del monte, de las alcantarillas y por último también del cauce del Kilimón".

En torno a las 10.30 horas de la mañana, los bomberos abandonaron el barrio mendaroarra tras haber sacado el agua de los portales afectados, hasta los que también se acercó el alcalde de la villa, Iñaki Arregi.

Afortunadamente, en la cuenta del Deba apenas se produjeron más daños de relevancia como consecuencia del desbordamiento del río. Tan solo cabe destacar las inundaciones que se produjeron (en las inmediaciones de Maltzaga) en un tramo del bidegorri que enlaza las localidades de Elgoibar y Eibar, lo que obligó a cerrar la vía de uso ciclista y peatonal.