La carretera N-121-A no para de ser noticia en las últimas semanas. Cuando no ha sido por hechos luctuosos, lo está siendo sobre todo por sucesos que pueden terminar con consecuencias irreparables para los conductores implicados o los que vienen enfrente.

Drogas y escopeta

Ha sido el segundo caso en apenas 24 horas. La Policía Foral navarra ha multado a un conductor a la altura de Bera que viajaba drogado y con un armadrogadoun arma. El varón, que se enfrenta a una pérdida de seis puntos del carnet de conducir y a una multa de 1.000 euros, portaba una escopeta que los agentes le han decomisado.

Drogas y bebé de 13 meses

Pero es que 24 horas antes, un suceso similar era noticia en Bortziriak: con drogas de por medio, un conductor fue sancionado por circular bajo los efectos de la cocaína, mientras que su compañera, que viajaba de copiloto, ha sido denunciada por tenencia de marihuana. Con ellos viajaba su hija de 13 meses.

Son dos casos en apenas 24 horas, aunque en los últimos meses son varias las noticias de actitudes peligrosas al volante que se están dando en una vía ya de por sí peligrosa, y que el Gobierno foral navarro ya trabaja en dotar de mayor seguridad.

Drogas y porno

A mediados de septiembre, otra noticia dejó un titular que saltó a muchos medios. Insólito y peligroso una vez más: un tren de carretera cuyo conductor, vecino de la localidad navarra de San Adrián, conducía viendo una película porno y dio positivo en cannabis, anfetamina y metanfetamina. Llevaba encima dos bolsas pequeñas con sustancias estupefacientes, que según él, eran un tratamiento recetado por su dentista. ¿A cuánto asciende la broma de tantas infracciones? A nueve puntos del carnet de conducir y a 1.801 euros

Cuádruple adelantamiento en línea continua

Este mismo año, un conductor fue sancionado a la altura de Sunbilla por adelantar con línea continua a cuatro camiones cuando transitaba por Bera. Los ocupantes de la camioneta viajaban sin ponerse el cinturón de seguridad. ¿La multa? Nueve puntos de carnet de conducir y 900 euros.

Sin cinturón, ni ITV

Un par de días antes, un Opel que entró en Navarra desde Irun levantó sospechas en una época de cierres perimetrales. Como está ocurriendo en los demás sucesos, la orden de detención del vehículo traía sorpresas para los agentes de la Policía Foral: no solo era la infracción de quebrar el cierre perimetral autonómico sin causa justificada, sino que el conductor dio positivo en drogas, los ocupantes también fueron denunciados posesión de marihuana y el vehículo no había pasado la ITV. ¿Resultado? Mil euros de multa y seis puntos del carnet para el conductor.

Coche patrulla cruzado

A comienzos de febrero, agentes de la Policía navarra adscritos a la comisaría de Elizondo interceptaron a un camionero extranjero que sextuplicaba la tasa de alcohol permitida. Los agentes observaron de madrugada un camión que presentaba daños compatibles con un accidentedaños compatibles con un accidente y pese a darle el alto, el conductor siguió durante diez kilómetros.

Hasta que se topó de frente cruzado el coche patrulla a la altura del kilómetro 65 de la N-121-A. El conductor, que llevaba pimientos a Reino Unido, se enfrentaba a un año de retirada del permiso de conducir y multa de hasta 2.400 euros en un juzgado de Pamplona, además de los 480 euros y retirada de 4 puntos por las tres infracciones cometidas.

Camión contra coche

Dos años antes fue noticia la condena a un chófer rumano residente en Granada por atosigar a un coche. Fue condenado de conformidad en el Juzgado de lo Penal número 4 de Pamplona a seis meses de prisión y a un año sin carné de conducir por conducción temeraria. El hombre, con su camión, atosigó a un conductor, su novia y dos niñas de 10 y 14 años cuando se dirigían a Bertiz.

El asunto se dio a conocer porque una de las ocupantes grabó la escena desde el interior del vehículo, mientras el camionero no respetaba la distancia de seguridad en caso de frenado, los toques de claxon y los destellos de luces para que aceleraran la marcha.

La carretera, peligrosa per se, ya ha sido objeto de críticas y de un movimiento vecinal que ha pedido medidas, como el desvío del tráfico internacional pesado por otras vías de mayor capacidad y seguridad.

Por de pronto, el Gobierno de Navarra continúa con sus planes para hacer de la calzada que une Behobia y la capital navarra en una carretera más segura, como convertirla en una vía 2+1. Eso sí, las obras pueden ayudar a salvar vidas, pero si quien se echa a la carretera lo hace bajo los efectos de las drogas, sea el alcohol u otras, las situaciones de riesgo se volverán a acumular.