Euskadi ha detectado en los últimos siete días un total de 3.222 nuevos positivos, frente a los 5.083 notificados la semana anterior. Este descenso en el número de contagios repercute directamente en uno de los principales indicadores de la pandemia, la incidencia acumulada en 14 días.
Este parámetro rompía su tendencia alcista hace siete días, registrando el primer descenso de casos de las últimas semanas al colocarse en 481 casos por cada 100.000 habitantes. Según el último informe epidemiológico de Osakidetza, este retroceso en la incidencia acumulada se ha mantenido a lo largo de la última semana, hasta colocarse en los 377, 55 casos por cada 100.000 habitantes, más de cien punto menos.
Por territorios, Araba presenta la tasa más elevada, con 413,98 casos. Le sigue Bizkaia, con una tasa de 373,09; y Gipuzkoa, cuya tasa es de 359,35 casos. En definitiva, el covid se repliega en Euskadi aliviando a su vez la presión sobre los hospitales vascos.
La mirada puesta en los mayores de 60
En su comparecencia el pasado martes tras el Consejo de Gobierno, la consejera de Salud alertó de una subida en el número de casos "entre los mayores de 60 años". Gotzone Sagardui detalló que la incidencia de este grupo poblacional se mantiene al alza y ascendió el martes a los 625 casos, frente a los 468 de incidencia media.
Además, indicó que este indicador muestra una tendencia "al alza con una pendiente moderada, pero mantenida al alza", por lo que la consejera consideró necesario estar "especialmente atentos a la evolución de la pandemia entre este grupo de edad". Será importante ver también el impacto de esta evolución "en términos de nuevos ingresos", precisó.
Sagardui concluyó su intervención advirtiendo de que "no hay que bajar la guardia" ante el covid-19, porque la pandemia "no se ha acabado en absoluto" y la aparición de una nueva variante que "condicione toda la escena epidemiológica y asistencial sigue siendo una posibilidad que hay que prevenir".