abakalera es ayer y hoy punto de encuentro de las experiencias más novedosas del sector agroalimentario, una cita en las que las startups más destacadas de Europa comparten experiencias y se las presentan a posibles inversores.
Organizado por el Instituto Europeo de Innovación y Tecnología (EIT Food), el evento Fun&Fan se integra en la estrategia de emprendimiento del Gobierno Vasco.
La directora de EIT Food del sur de Europa, Begoña Pérez Villarreal, explicaba así las características del evento. "Esta es la tercera edición del Fun&Fan, el evento anual de emprendimiento de EIT Food al que hemos venido con 30 startups de nuestros programas: la incubadora, la aceleradora y el programa Ewa, dirigido a mujeres, principalmente del medio rural, para empoderarlas y lograr que sus ideas novedosas se hagan negocio".
"EIT Food pretende ayudar al sector para que la innovación y el emprendimiento sea algo habitual", abundó Pérez Villarreal. Y es que el abanico de iniciativas novedosas existente en la actualidad es muy amplio. "Hemos visto que en nuestros programas hay tres áreas que se repiten: tecnologías para hacer la agricultura más sostenible e inteligente, ideas que ayudan a la sostenibilidad del sector y propuestas para mejorar la alimentación, para hacerla más saludable".
"Recibimos alrededor de 350 o 400 solicitudes al año de equipos talentosos y seleccionamos una decena para cada programa. La selección se basa sobre todo en la tecnología y en que sea escalable. Queremos ir a un sector agroalimentario sostenible, saludable y de confianza", señaló la representante de EIT Food.
"También damos importancia a la tecnología que ayuda a hacer la trazabilidad del alimento y a que la información llegue al consumidor de una forma mejor y más directa. Es una de las tendencias del sector", explicó Pérez Villarreal, que tiene claro que la innovación en el sector agroalimentario es un área de futuro.
"Los seres humanos comemos tres veces el día. Somos lo que comemos y la alimentación es fuente de salud. Tras la pandemia el sector agroalimentario ha salido reforzado, ha demostrado que es muy resiliente y se ha mantenido y ha respondido a la sociedad", añadió. "A futuro quiere adaptarse a la nueva ética del consumidor. La sostenibilidad es ya un criterio fundamental y vemos que hay una vía clarísima de innovación. El sector lo tiene claro: innovar o morir", concluyó Pérez Villarreal.
Color Sensing es una de las startups que acudió a la cita de Tabakalera. María Eugenia Martín, CEO de la empresa, en una azpeitiarra afincada en Barcelona que explicaba así las características del novedoso proyecto que están impulsando.
"Hemos desarrollado una etiqueta inteligente para monitorizar la frescura de los alimentos. Queremos ayudar a los fabricantes de alimentos envasados a evitar el desperdicio y a mejorar su rentabilidad". Porque, en la actualidad, para conocer el estado de un envase el método que se usa es "perforar" una muestra para conocer "qué pasa con los gases que hay dentro". "Con esta tecnología se podrían chequear todos los envases en la línea sin perforarlos", destacó.
"Esta etiqueta te cuenta esa historia sin necesidad de perforar el envase. ¿Cómo? En la etiqueta, que es un código QR, colocamos unas cintas inteligentes, mágicas. Nosotros no vemos cómo cambian de color, pero cambian en función de lo que pase dentro del envase. Sacando una foto a la etiqueta recuperamos esa información", puntualizaba.
"Son un sensor. Cada cinta es sensible a distintos parámetros. Una es sensible a la temperatura y cambia de color si aumenta. Cuando se hace la foto sabremos que se ha roto la cadena de frío" destacaba. Otra cinta, por ejemplo, es sensible al CO2, uno de los gases que se halla dentro del envase. La cinta cambiaría de color si aumenta o se reduce, y en la foto se sabría cuál es la concentración de CO2 en ese momento y se puede saber si ha habido una fuga o si el producto está fresco o deteriorándose antes de tiempo. Color Sensing tiene en la actualidad dos cintas desarrolladas, que están adaptando a impresión industrial para hacer pruebas piloto. Hasta la fecha tienen desarrolladas la cintas para medir CO2 y la degradación de producto y están desarrollando las que miden el oxígeno y la temperatura. En este momento trabajan en el proceso de certificación de seguridad alimentaria, para lo que buscan "una ronda de inversión".
Esta tecnología se aplicaría "en productos envasados en atmósfera modificada", principalmente carne, pescado y comida preparada.
Otra empresa que acudió a Tabakalera es la navarra Genbioma. Josune Ayo, directora de I+D de la empresa, daba cuenta de su actividad. "Somos una startup que con el uso de una serie de probióticos de alimentación animal fuimos viendo que mejoraban la salud de dichos animales. Pensamos que sería interesante dar el salto y comprobar si tenía aplicación en personas diabéticas o prediabéticas".
Para ello han ido "identificando y valorando la seguridad de ciertos microorganismos beneficiosos para ayudar a regular el azúcar en sangre cuando lo tienes alto y prevenir el desarrollo de diabetes".
En la actualidad, Genbioma está inmerso en "el ensayo de intervención en humanos", reclutando personas con el azúcar alto en sangre, tarea que están llevando a cabo en Navarra, Alicante y Murcia. "Es importante que la gente se anime para finalizar esta fase de demostración", explicó Ayo. "Hoy por hoy nos faltarían unas 50 personas", añadió.
Tras el ensayo en humanos, "podríamos comercializar el probiótico y sería una novedad a nivel internacional". La idea, abundó, "es ser pioneros en las aplicaciones de probióticos para regular el azúcar en sangre y que sea una regulación a largo plazo, que no sea una regulación solo después de la comida, como hacen otros compuestos".
El probiótico de Genbioma lograría "regular el azúcar en sangre tres meses y este es el valor diferencial. Además, es un producto asequible para que lo pueda tomar la mayoría de gente". Estos probióticos se presentarían en dos formatos, "en polvo, como ingrediente de aplicación en lácteos o en la industria alimentaría en distintas matrices, y en las cápsulas, que tenemos desarrolladas para tomar una al día de forma continuada, manteniendo la glucosa estable tres meses".
"El sector se adapta a la nueva ética del consumidor y la sostenibilidad es básica"
Directora de EIT Food
"Trabajamos con probióticos que permiten regular el azúcar en sangre tres meses"
Directora I+D de Genbioma
"Hemos desarrollado una etiqueta que monitoriza el estado
del producto envasado"
CEO de Color Sensing
