- La Audiencia de Gipuzkoa ha condenado a dos años de cárcel al empleado de una sucursal bancaria que se apropió de 254.800 euros de la entidad en la que trabajaba “acuciado por las deudas” generadas por la “adicción al juego que padecía”.

El procesado se aprovechó de que era el responsable del arqueo diario del cajero automático de la oficina para apoderarse “periódicamente” de “diversos importes económicos” entre abril y octubre de 2019, que no obstante restituyó luego íntegramente a la entidad junto a los intereses y otros gastos causados. Durante la vista por estos hechos, celebrada en la Sección Primera de la Audiencia Provincial, se acordó que el inculpado no ingrese en prisión con la condición de que no vuelva a delinquir en los dos próximos años.