- La llegada masiva a Ceuta en sólo dos días de unos 8.000 inmigrantes, entre ellos 1.500 menores, hizo que el Gobierno español pusiera “todos los medios necesarios” para devolver “por los cauces establecidos” a quienes entraron irregularmente. Más de la mitad (5.600) ya habían sido devueltos, aunque sin detallar qué protocolo se había seguido.

Unas devoluciones que se estaban produciendo de forma inmediata, según subrayó en el Congreso este miércoles el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y después de que el martes el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, afirmara que se estaban realizando “por los cauces establecidos”. Aunque no precisó claramente cuál es el protocolo que se está siguiendo en cada momento, el titular de Interior negó que se estén devolviendo a menores de edad a Marruecos.

Sin embargo, varias ONG ponían en duda estas afirmaciones ya que entienden que no se está llevando a cabo un proceso con “suficientes garantías”.

La norma fija que “los extranjeros que sean detectados en la línea fronteriza de la demarcación territorial de Ceuta o Melilla mientras intentan superar los elementos de contención fronterizos para cruzar irregularmente la frontera podrán ser rechazados a fin de impedir su entrada ilegal en España”. En todo caso, el rechazo se realizará “respetando la normativa internacional de derechos humanos y de protección internacional de la que España es parte”, lo que, según dijo Francisco Solans, abogado experto en extranjería, no está ocurriendo en Ceuta.