- Osakidetza se está viendo obligada a demorar intervenciones “no urgentes” por el “alto tensionamiento” de los hospitales vascos debido al elevado número de pacientes con covid que están ingresando, una presión que también se ha trasladado a la Atención Primaria.

La consejera de Salud, Gotzone Sagardui, reconoció ayer esta problemática en los centros hospitalarios de la CAV, aunque subrayó que “todo lo urgente sigue siendo atendido con normalidad”.

En los hospitales la situación es cada día más preocupante y el martes se registraron 115 nuevos ingresos, una cifra que no se daba desde mediados de noviembre, cuando la segunda ola estaba en su punto álgido. El total de pacientes covid en planta es de 524, prácticamente 100 más que hace una semana, mientras que el número de enfermos en estado crítico es ya de 154, una treintena más que hace siete días. Estos 154 pacientes en las unidades de cuidados intensivos se acercan a los 173 que significaron el pico de enfermos graves en la tercera ola.

El 78% de las 358 camas abiertas en las UCI de los hospitales vascos están ocupadas y más de las mitad de los ingresados tienen covid, según indicó Sagardui, quien insistió en que Osakidetza tiene la posibilidad de seguir aumentando el número de camas hasta 600 si fuera necesario. “No es una situación buena, pero a pesar de ello Osakidetza sigue garantizando la asistencia sanitaria a toda la población”, remarcó.

“Las nuevas variantes están interactuando con los organismos de forma que están requiriendo una atención más especializada de lo que lo hacía la variante original. Se está generando un mayor número de casos que está requiriendo una atención sanitaria más intensa”, explicó la consejera de Salud, quien reconoció la demora de algunas intervenciones no urgentes, concretamente en los centros de Donostialdea, Basurto y HUA de Araba, aunque se trabaja en red estableciendo flujos de derivación para tratar de equilibrar las tensiones asistenciales.

Uno de los hospitales que más está notando la carga de trabajo derivada de los ingresos por covid es el de Donostia. Tal y como reconocía este pasado fin de semana a este periódico Felix Zubia, jefe de la unidad de cuidados intensivos, esperan unos días “muy duros” en la UCI. “El número de ingresos en la unidad desciende a los diez días de que caiga la tasa a pie de calle”, dijo. Una situación que no se ha dado, ya que la cantidad de casos diarios sigue siendo muy elevada.