- En medio de las intensas campañas de vacunación que han impuesto los diferentes Gobiernos en los países americanos, Brasil, Colombia, Ecuador y Paraguay han terminado una semana con sendos picos y medidas de urgencia para salir de los cuidados intensivos a los que los llevaron los últimos datos de contagios y muertes por el covid-19. Y no es un fenómeno exclusivo del continente. La Organización Mundial de la Salud (OMS), a través de su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió el viernes de que la pandemia del covid-19 está camino de alcanzar el mayor pico de infecciones registrado hasta ahora.

En Brasil, el gigante sudamericano, país que vive una segunda ola más virulenta y letal que la primera, con una media de 3.000 fallecidos por día, por primera vez desde el inicio de la pandemia, las personas menores de 40 años son mayoría entre los pacientes ingresados en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI). A pesar de la crisis, el Gobierno de Sao Paulo, el estado más castigado en el país por el coronavirus, anunció la reapertura, con limitaciones, de comercios e iglesias a partir de hoy.

En Colombia, la virulencia de la tercera ola, que disparó los contagios y muertes en el país andino hace varias semanas, obligó a Bogotá y Medellín, las dos mayores ciudades del país, a imponer nuevas cuarentenas a las que se oponen sectores duramente golpeados como el comercio. Las infecciones y decesos en Colombia se han triplicado en la última semana, superando los 16.000 contagios diarios, cifras que el país no registraba desde hace más de dos meses, cuando el segundo pico de la pandemia puso al límite la red hospitalaria.

Mientras tanto, en Ecuador, los hospitales saturados, los médicos agotados y un lento proceso de vacunación marcan la lucha contra el covid-19. En el país andino las cifras oficiales hablan de más de 355.000 contagiados, aunque los médicos consideran que hay un alto subregistro pues no toda la población accede a las pruebas PCR.