DONOSTIA - Tras el positivo de una persona trabajadora en la residencia San Juan de Segura, y siguiendo las indicaciones sanitarias para estos casos, la Diputación Foral de Gipuzkoa y la DYA han realizado un mapeo preventivo de pruebas PCR a las personas usuarias y trabajadoras convivientes del mismo sector dentro del centro. Tal y como indica la nota de prensa facilitada por la Diputación, los resultados han detectado siete casos positivos en COVID-19 entre las personas usuarias y dos entre las trabajadoras. Las siete personas usuarias habían sido vacunadas y se encuentran asintomáticas, pero por prevención y para evitar la propagación del virus dentro de la residencia, han sido trasladadas al centro de referencia COVID-19 ubicado en el Hospital de Eibar.

A la falta de la confirmación de si se trata de la variante británica, la diputada de Políticas Sociales, Maite Peña, ha recordado que el hecho de estar vacunado, no evita contraer la enfermedad, sino que no se desarrollen síntomas graves de la misma. Además, ha añadido que "seguimos alerta", realizando mapeos preventivos de pruebas PCR para "perseguir y detectar cualquier caso positivo entre las personas usuarias y trabajadoras de las residencias". Por eso, ha detallado que, desde julio, la Diputación Foral de Gipuzkoa y la DYA han realizado 118.166 pruebas PCR, lo que supone una media de 12 pruebas por persona.

El último caso positivo entre las personas residentes, se detectó el pasado 13 de febrero, y desde el 26 de febrero no ha habido ningún caso activo en las residencias. "Seguimos alerta, con la guardia alta y cumpliendo todas las medidas preventivas y de seguridad", ha señalado Peña, y ha añadido que las residencias son "espacios conectados con la comunidad", por lo que "no nos podemos relajar, porque el virus sigue estando entre nosotros y el contagio comunitario va en aumento".