- La microbióloga vizcaina Miren Basaras, responsable del Comité de Vigilancia covid-19 en la UPV/EHU, observa con cierta preocupación el momento epidemiológico que se vive en Euskadi, aunque considera lógico este estancamiento o empeoramiento tras varias semanas de mejoría. "Cuando se llega al pico de casos o incidencia, la bajada suele ser muy rápida al principio porque se instalan medidas muy drásticas, pero lugo se llega a una ralentización. Ya ha pasado antes y vuelve a pasar ahora. El problema es que si las medidas no son muy restrictivas, se puede volver a subir", dice la experta.

Considera Miren Basaras que "las medidas ahora son restrictivas y se espera que no vayan aumentando los casos positivos de una manera alarmante". Sin embargo, el factor de la libre movilidad podría alterar esta perspectiva: "El hecho de movernos no implica que tenga que haber un aumento de casos, lo que va a influir es que en esos movimientos podamos infringir otra serie de medidas como reuniones con grupos de personas. Eso es lo que puede influir. Y hay que tener en cuenta también que los positivos de ahora son positivos de hace 15 días o tres semanas, no del pasado fin de semana".

La microbióloga de la UPV hubiera "abierto primero los territorios históricos y, si la situación iba bien, a las dos o tres semanas ampliarlo a toda la comunidad". "Hubiera sido más prudente", reconoce, "aunque es cierto que el resto de medidas son bastante restrictivas". En este sentido, considera "importante" que la población respete las medidas vigentes: "Tenemos una serie de normas, pero luego está lo que hacemos cada uno de forma individual. Por ejemplo, si vamos a un lugar en el que hay una aglomeración importante, pues no deberíamos entrar. Y que tengamos libre movilidad no significa que estemos todo el día de un lado para otro".

Basaras alerta también de los problemas que pueden causar las variantes del coronavirus: "No podemos olvidar que la británica, que parece que ya es la dominante, se transmite más fácil y parece también que su periodo de positividad es superior. Se está valorando que alguien infectado por la variante británica esté catorce días aislado en lugar de diez. Si a eso le unimos que se puedan infringir algunas de las normas, es una posibilidad que pueda haber un rebrote".

Ante este panorama, la microbióloga vasca no descarta que haya que tomar medidas más restrictivas que las actuales: "Lo que haría es ver realmente cómo está evolucionando estos días la pandemia y, si hay algún dato o parámetro que nos preocupa, tomar medidas restrictivas lo antes posible. Si nos tienen que volver a cerrar perimetralmente o adelantar el toque de queda porque los datos lo indican, deberían hacerlo lo antes posible, no esperar unas cuantas semanas". Por ello, pide también "acelerar" el proceso de vacunas, "especialmente a mayores de 70 años y gente con patologías": "Sé que el suministro es limitado, pero soy partidaria de poner las vacunas cuanto antes y no guardar las de Pfizer y Moderna para una segunda dosis".