BEASAIN. Varias decenas de personas se han concentrado en silencio estar tarde del miércoles en Beasain, con tiento, pero con determinación al mismo tiempo, conscientes de la complejidad del caso, pero convencidos también de que había que arropar a la víctima y su familia. Una agresión con testigos, por parte de un adulto de unos 50 años a un niño, cerca de su casa: asaltado por sorpresa, agredido, según los testigos. Ya a oscuras, un lunes, hacia las 20.00 horas. Un caso, no obstante, en el que subyacen otros problemas asociados del presunto agresor. Un posible trastorno.
La víctima, un niño. "Inadmisible", recoge la nota hecha pública por la Ikastola de Beasain, convocante de la concentración. ¿Maltrato infantil? Seguramente no en su raíz. Con la sensación de que "había que hacer algo" y, sobre todo, "hacer que el niño y su familia se sientan arropados", el silencio solo fue roto por un aluvión de aplausos al término del acto, que duró apenas diez minutos. Un acto sentido. Lleno de niños. La plaza Urbialde de Beasain ha estado presididad por cuadernos y trabajos de los niños de la ikastola, agrupados en forma de corazón.
'Denak gara ume. Umeak denonak dira. Babes ditzagun umeak' ('Todos somos niños. Los niños son de todos. Protejamos a los niños'), decía el cartel que dominaba el acto. Nada más. Los responsables del centro educativo no han querido hacer más declaraciones. Simplemente se han remitido a la nota de prensa emitida. El hecho había tenido amplia repercusión en el pueblo, incluso la foto del presunto agresor, un varón arraigado en el pueblo, circuló por los móviles.
Según ha explicado en su comunicado la ikastola Andramendi de Beasain (constatado también por fuentes solventes), los hechos se habrían producido el día 4 de este mes, hacia las 20.00 horas, cuando el agresor atacó a un niño cuando este regresaba a casa de hacer las compras.
Según varios testigos, el agresor, un hombre conocido en Beasain, habría salido de entre unos contenedores tras los cuales estaba escondido y habría agarrado del cuello con fuerza y agredido al niño. Del mismo modo, habría "tratado de llevárselo", explica el propio comunicado. Los gritos del niño alertaron a un grupo de vecinos que fueron en su ayuda y lograron liberar al menor de su agresor, trifulca incluida, según apuntan diversas fuentes.
Debido a esta presunta agresión, la ikastola de Beasain convocó la concentración, ya que "considera que es necesario romper el silencio que rodean a este tipo situaciones y denunciar en voz alta una situación que es inadmisible. En estos duros momentos, el niño y su familia necesitan el apoyo de todos".
