- Las demandas de disolución matrimonial registraron en Euskadi un importante retroceso en 2020, año marcado por la pandemia, ya que se situaron en 3.723 frente a las 4.339 de 2019, lo que supone un descenso del 14,1%. El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) informó ayer de la evolución de las separaciones y divorcios el año pasado, cuando también en el conjunto del Estado se dio una caída interanual del 13,3% en este tipo de demandas, un descenso mucho más acusado que en años anteriores ya que en 2019 la bajada se cifró en el 1,9%. Euskadi sigue siendo en cualquier caso una de las comunidades donde menos parejas se rompen.