Agentes de la Guardia Municipal de Donostia han comenzado este lunes a recibir la primera dosis de la vacuna de AstraZeneca contra la covid-19, al igual que lo harán en los próximos días todos los agentes que lo deseen, los bomberos y los agentes de movilidad del Ayuntamiento donostiarra.
Las primeras dosis se han inoculado en la comisaría de la Guardia Urbana del barrio de Morlans, donde estaba citados policías municipales de hasta 55 años, a los que se destina la solución de AstraZeneca, vacuna que también recibirán otros colectivos a partir de este martes en Illunbe.
El concejal de Seguridad Ciudadana, Martín Ibabe, ha explicado que los colectivos que han iniciado hoy la vacunación son "servicios de urgencia que están en permanente contacto con la ciudadanía", en situaciones de "riesgo", por lo que su protección constituye "un paso importante".
Ha recordado que esta campaña, por las características de la vacuna disponible afecta a los trabajadores de hasta 55 años y es voluntaria, aunque ha afirmado que "el grueso del servicio está por la labor, por su propia seguridad y por la seguridad del servicio que presta".
"Creo que es un paso más en esta complicada situación que nos es tocado vivir como sociedad desde hace un año ya largo", ha señalado Ibabe en declaraciones difundidas por el Ayuntamiento donostiarra.Un pinchazo "imprescindible"
Uno de los primeros agentes vacunados ha valorado la "tranquilidad" que le aporta la inmunización, ya que en su puesto trabaja "con muchísimas personas en la calle", por lo que la vacuna ayuda a prestar el servicio "más relajado" y sin "ese miedo que hay hoy en día a la hora de trabajar".
Otra agente ha explicado, tras recibir el pinchazo, que resulta "imprescindible" la vacunación, porque los agentes de la Guardia Urbana están "todos los días en la calle con gente".
"Lo he tenido claro desde el primer momento, hay que confiar y poner todo lo que esté en nuestras manos para mejorar la situación que estamos viviendo, por esa parte no he dudado en ningún momento", ha manifestado.
Ha recordado que a diario trabajan con gente, muchas veces a "distancias cortas", por lo que la vacunación constituye una medida "que hay que asumir" tanto por la salud de los policías como por la de las personas con las que tratan en su "día a día".
