- 2020 fue un año anómalo en todos los sentidos, también en materia de movilidad, seguridad vial y automoción.

El Real Automóvil Club Vasco Navarro (RACVN) presentó ayer su balance anual, en el que se destaca que el pasado año se constató un notable descenso del número de fallecidos en las carreteras. En Euskadi, en 2019 perdieron la vida en accidentes de tráfico 51 personas, mientras que el pasado año la cifra de fallecidos fue de 38. En el Estado el descenso también fue evidente, pasando de 2.101 a 870 personas.

En la CAV, por territorios, 17 personas fallecieron en Gipuzkoa, frente a las 19 de 2019; 16 en Bizkaia, cuando el año anterior fueron 22, y cinco en Araba, la mitad que el año precedente, siendo mucho más importante el número de muertes en carreteras que en autovías y autopistas.

En lo que se refiere a conductores de motos y ciclomotores, se contabilizaron nueve fallecimientos en Euskadi frente a los 16 de 2019.

Según apuntaron los representantes del RACVN, el presidente Pedro Martínez de Artola y el director gerente, Eduardo Martínez, el confinamiento y los cierres perimetrales han favorecido una importante reducción de los desplazamientos y, en consecuencia, de la siniestrabilidad.

Respecto a los tres fallecimientos de motoristas en las vías de Gipuzkoa en solo una semana, los representantes del RACVN hicieron hincapié en que no responde a la normalidad, dado que no son habituales los accidentes mortales en trama urbana, aunque en alguno de los puntos en los que ha ocurrido un siniestro mortal, caso del acceso a Okendo desde la Avenida en Donostia, consideran que hay problemas sin resolver, siendo una incorporación que obliga a los autobuses "a abrirse", perdiendo visibilidad.

El perfil de la persona fallecida en accidente de tráfico corresponde, según el RACVN, al de un varón de mediana edad, conductor del vehículo accidentado y que origina el siniestro por una distracción y no tanto por conducir a una velocidad inadecuada. El despiste, apuntó Martínez de Artola, es debido en un importante número de ocasiones a la utilización del teléfono móvil mientras se conduce. En el accidente, según la valoración del club, lo habitual es que pierda la vida la persona que conduce.

En el 2020, el RACVN llevó a cabo 4.965 asistencias en vehículos, un 11,54% menos que el año anterior. El 27,97% de las asistencias respondieron a problemas de la batería, seguidas por las realizadas para atender a vehículos que se quedaron parados (11,90%) y los que no arrancaron (10,35%).

El pasado año en el Estado se registró un importante descenso en la venta de vehículos nuevos, aunque aumentó el parque móvil. La conclusión no puede ser otra que el parque automovilístico está muy avejentado y que esta tendencia se ha incrementado, con vehículos con un media de 12,7 años de antigüedad, frente a los ocho años de media de 2008.

En lo que se refiere a las matriculaciones del pasado año, más del 50% corresponde a vehículos de gasolina, menos del 25% a los diésel, y el resto correspondería a híbridos, eléctricos y de gas. En Euskadi este último grupo tuvo mayor peso que el de los vehículos diésel.