- El buque oceanográfico Hespérides ha tenido que cancelar su participación en la campaña Antártica por un brote de coronavirus que ha afectado hasta el 60% de su dotación, pese a los esfuerzos realizados para convertir al barco en espacio libre de covid, con cuarentena previa y pruebas PCR.

Expertos militares señalan el caso del Hespérides como ejemplo de cómo se puede expandir el virus en un espacio cerrado que se suponía seguro. El día 30 de diciembre, el buque partió del puerto de Cartagena con una dotación de 58 personas aparentemente sanas. Y tan solo cuatro días después ya contaba con cuatro positivos, que fueron aumentando hasta llegar a un total de 35.

El Hespérides tenía previsto participar en la campaña que cada año tiene lugar en la Antártida y que aúna a militares y científicos. Dadas sus particulares características, el Comité Polar Antártico elaboró un estricto protocolo para poder desarrollar su misión pese a la pandemia.

Siguiendo con estos criterios, toda la dotación del buque, todavía en tierra, realizó una prueba PCR e inmediatamente después se sometió a un periodo de cuarentena. Tras él, volvió a realizarse una nueva prueba PCR antes de embarcar.

Pese a estas garantías, la alarma saltó solo tres días después de partir cuando un miembro de la tripulación presentó síntomas compatibles con la covid. El 3 de enero ya se había detectado la existencia de un foco a bordo, con cuatro infectados. El Hespérides decidió entonces poner rumbo a Las Palmas para el tratamiento de los enfermos, aislamientos y vigilancia de todos los que habían estado en contacto con ellos. Finalmente los positivos se elevaron a 35.

Superado el brote, el Hespérides partió rumbo a Cartagena para prepararse para otras campañas nacionales que se realizarán los próximos meses.