- La empresa Verter Recycling, gestora del vertedero de Zaldibar que se derrumbó hace un año sepultando a dos de sus trabajadores, exigió ayer “mayor rigor” al Gobierno Vasco en la determinación de los daños y advirtió de que, en cualquier caso, no sería la única responsable de los mismos.

El expediente de Responsabilidad Ambiental del Gobierno Vasco atribuye a Verter la responsabilidad de los “daños significativos” que se han producido en las aguas superficiales y subterráneas y en el suelo por el derrumbe y fija un plazo de diez días hábiles, prorrogables en otros cinco, para que la empresa presente un proyecto de reparación de los daños medioambientales sufridos.

En una nota, la empresa reprochó al Gobierno Vasco que la resolución en la que atribuye a Verter, en su condición de operador de la instalación, la responsabilidad medioambiental relativa a ese suceso y le obliga a reparar los daños medioambientales que se han generado a consecuencia del mismo, “se ha emitido sin las adecuadas garantías procedimentales y obviando metodologías y guías establecidas para la cuantificación de daños”.

Por ello, la compañía pidió “un mayor rigor en lo relativo a la adopción de una valoración y medidas de esta importancia y transcendencia, tanto en lo que respecta al procedimiento debido, como a las conclusiones finales de dicha resolución”. Con relación a las responsabilidades a las que se hace mención en la resolución, la empresa rechazó “que se den las condiciones legales necesarias, según lo establecido por la Ley de Responsabilidad Ambiental, para la atribución de la responsabilidad en los términos establecidos en la resolución y, muchos menos, con carácter exclusivo sobre la empresa”.