- La hostelería retomó ayer su actividad en Catalunya tras 40 días de cierre, aunque con un aforo limitado al 30%. En cualquier caso, según los cálculos del Gremio de Restauración de Barcelona, en la capital solo el 70% de los bares, restaurantes y cafeterías pudieron reabrir debido a la imposibilidad de adaptarse a las medidas exigidas en esta primera fase de la desescalada en materia hostelera.

La proporción de locales que han decidido levantar la persiana es menor entre aquellos restaurantes que están enfocados especialmente en las cenas o en los establecimientos más pequeños que no tienen terraza, lo que dificulta su quehacer en esta primera etapa de la actual desescalada.

Todo el sector de la restauración de Catalunya puede volver a abrir hasta las 21.30 horas y con un aforo interior permitido del 30% mientras que en el exterior las terrazas pueden estar al completo, aunque manteniendo las distancias de seguridad.

En un comunicado, el director del Gremio de Restauración, Roger Pallarols, subrayó que todavía hay muchos negocios que "no ven viable la reapertura" debido a las condiciones de este primer tramo de la desescalada.

Para permitir que todos los establecimientos puedan abrir y que, por tanto, sus trabajadores abandonen los ERTE, el Gremio reclama a la Generalitat que alargue el horario límite de apertura hasta las 00.00 horas, lo que implica la modificación del toque de queda, que ahora es hasta las 22.00 horas.

El Gremio se dirigió además a los restauradores para pedirles que apliquen "con diligencia" las medidas sanitarias, como la distancia de dos metros entre clientes de mesas separadas, las restricciones del aforo y el uso de la mascarilla.