DONOSTIA - El alcalde de Donostia, Eneko Goia, ha señalado hoy que la Policía Municipal informará a los franceses que se desplazan a diario a la ciudad, por ocio o compras, de las restricciones de movilidad vigentes en Euskadi pero ha reconocido que ésta es "una cuestión legal que ofrece muchas dudas interpretativas".

Goia ha hecho este comentario sobre los numerosos ciudadanos del otro lado de la frontera que acuden habitualmente a Donostia preguntado por los periodistas durante la rueda de prensa que ha ofrecido en el Ayuntamiento tras la reunión del gobierno local.

Según ha indicado, los agentes de la guardia urbana harán un labor de "comunicación" a estos visitantes pero en principio sin "carácter imperativo", dado que el cierre perimetral de Euskadi y la prohibición de desplazamientos no justificados entre municipios decretado por el Gobierno Vasco para frenar los contagios de covid-19 están sustentados en "un marco legal" que es "aplicable a personas de nacionalidad española".

El alcalde donostiarra ha agregado que, además, la frontera franco-española de Irun no está cerrada y no conoce las eventuales decisiones que podrían adoptar las autoridades galas al respecto.

"El Gobierno francés está ahora envuelto en un proceso de toma de decisiones ante la gravedad de la situación y no se descarta que pueda ser ésa (el cierre de la frontera) una de ellas", ha comentado Goia, tras lo cual ha agregado que la clausura de dicho límite "ofrecer algo de claridad a este escenario".

En cuanto la prohibición de permanencia en los parques de la ciudad, el regidor donostiarra ha advertido de que la Guardia Municipal "vigilará" estos espacios públicos y "velará" por su cumplimento.

También ha comentado que el Ayuntamiento "está trabajando" en "nuevas posibilidades" de alojamiento para las personas sin hogar que se sumen a "los recursos ya disponibles", con el fin de facilitar el cumplimiento del toque de queda que limita la movilidad de las 23.00 a las 6.00 horas.