- La asociación Lagundu NEE Euskadi, que trabaja en favor de los derechos de los alumnos con necesidades especiales, considera que las medidas adoptadas por el Gobierno Vasco con motivo de la vuelta a las aulas para frenar la expansión del COVID-19 son “mero papel mojado para trasladar en última instancia toda la responsabilidad a los centros educativos”.

En una nota, dicha organización denuncia que no se dote a los centros educativos “de medidas extraordinarias de personal para evitar los contagios”. Pone de manifiesto que para los profesiones que atienden alumnado con necesidades especiales es inviable la correcta aplicación de determinadas medidas de seguridad por la propia naturaleza de su trabajo, en el que deben de tener contacto directo con estos alumnos.

Según indica, estos profesionales “deben colocarse a su altura para poder hablar con ellos y tratar de tener una mejor comunicación”, deben “tocar” a determinados alumnos para “realizar un cambio de pañales, asearles en el baño o cambiar de ropa” o deben darles de comer “si no son capaces de realizar dicha función”, entre otras situaciones.

Para Lagundu NEE, la situación actual de incremento de contagios en Euskadi “no debería infravalorarse y se deben tomar medidas excepcionales, sin tener que trasladar el miedo a las familias si estas deciden no llevar a sus hijos a los centros educativos para evitar contagios, como acto de prudencia y responsabilidad sanitaria”.

La asociación reclama que las familias tengan “libertad total” para poder decidir si sus hijos acuden al centro de manera presencial, y pide una reducción del ratio a no más de diez alumnos por aula y una mayor dotación económica, de personal y dispositivos electrónicos a los centros educativos. También demanda un plan de actuación para las familias de alumnado con necesidades especiales para que este colectivo “no se vea abandonado nuevamente a su suerte como ya ocurrió a finales del curso pasado”, cuando estos alumnos “en su mayoría no tuvieron contactos y han sufrido involuciones bestiales y pérdida irrecuperable y vital del tiempo en su desarrollo”: “Estos alumnos no pueden ser los grandes olvidados. Se deben tomar medidas reales, asumibles y responsables”, sostiene la organización.