DONOSTIA. La Fiscalía de Gipuzkoa pide penas que suman doce años de cárcel para un hombre acusado de abusar de una menor con la que tenía una relación sentimental y con la que habría mantenido relaciones sexuales completas en dos ocasiones, a pesar de la negativa expresa de la chica, en un domicilio de San Sebastián.

Según detalla el escrito de acusación provisional de la Fiscalía, al que ha tenido acceso EFE, el primero de estos hechos, que serán juzgados próximamente en la Audiencia de Gipuzkoa, habría sucedido el 13 de septiembre de 2018 en la vivienda del encausado, cuando éste manifestó a la menor su deseo de tener relaciones, a lo que ella respondió "en sentido negativo".

A pesar de ello, el hombre comenzó a besarla y, aunque la perjudicada "insistió en su negativa", presuntamente la violó, tras lo que supuestamente le impidió abandonar la habitación en la que se hallaban, hasta que finalmente le permitió salir del domicilio y la acompañó hasta la parada del autobús.

Unos días después, en el mismo lugar, "ambos decidieron libremente y de común acuerdo mantener relaciones sexuales" si bien, en un momento dado, la menor hizo saber al inculpado que no quería continuar y "le pidió que se detuviera", a pesar de lo cual el hombre presuntamente "ignoró" la petición de la chica y continuó "con ánimo de atentar contra la libertad sexual" de la víctima.

El texto del Ministerio Público también recoge que, a lo largo de la relación sentimental que mantuvo con el procesado, la chica fue objeto de insultos como "guarra".

La Fiscalía considera que estos hechos son constitutivos de un delito continuado de abuso sexual a una menor de 16 años con la agravante de parentesco, de un delito continuado de coacciones leves y de otro, también continuado, de vejaciones injustas, por los que reclama que se imponga al acusado doce años de prisión y 20 días de localización permanente, y que cuando sea excarcelado permanezca otros ocho años en situación de libertad vigilada.

Asimismo, demanda que el hombre no pueda comunicarse con su víctima ni aproximarse a ella durante veinte años, y que sea inhabilitado para cualquier profesión que conlleve contacto regular y directo con menores durante quince años. Además, el Ministerio Público solicita una compensación de 10.000 euros para la chica, por los daños morales sufridos.