alentina Palmero tiene su taller en Zumaia. Antes de que el COVID-19 entrara en nuestras vidas por la puerta grande, esta venezolana afincada en Gipuzkoa trabajaba principalmente en la elaboración de cuidados y originales bolsos y mochilas.

Llegó el confinamiento y de su mano una necesidad de reinventarse, que en el caso de Valentina Palmero tiene su base en un constante trabajo de investigación que, en lo que compete a las mascarillas, se centra en los materiales.

“Empecé incorporando el TNT como barrera y fui investigando y metiendo más color en las capas externa, porque todo era una tristeza”, afirma Palmero, una artesana exigente que fue probando tejidos homologados y que garantizan una buena respiración.

Palmero tiene una línea de bolsos elaborados con redes de pesca reutilizadas. Como complemento las reinterpretó en sus mascarillas, aunque en este caso optó por material no utilizado.

“Estoy haciendo pruebas con tejidos, con diseños de mascarillas-pantalla. No paro de investigar, porque hay temas como la condensación que son difíciles de resolver. También estoy trabajando con laboratorios 3D”, explica.

Hasta ahora, Palmero ha trabajado en la investigación del tejido para garantizar un producto seguro. Ha llegado el momento del diseño. “He empezado a hacer mascarillas a juego con el bolso. En mis líneas de bolsos de alta gama, estos van con su mascarilla a juego dentro. También estoy trabajando con la reversibilidad y las distintas texturas”, subraya.

El juego con el diseño le ha permitido incluso profundizar en el sentimiento patrio, ya que en mascarillas y bolsos ha utilizado una muy identificable imagen de un pintor venezolano. “Cuando la gente se las ponía conectaba al instante con Venezuela”, explica.

“La gente tiene miedo y yo no quiero hacer mascarillas porque sí. Estoy trabajando con los tejidos para garantizar la seguridad. Hay tejidos impermeables que reducen la respiración, otras telas que dan calor... Ha sido un proceso de prueba error” asegura.

Pero el resultado está siendo bueno y ahora trabaja con un “tejido técnico y transpirable” que se utiliza para la ropa de deporte y que se complementa con el filtro TNT, un tejido que no tiene hilos ni trama, y “no deja pasar tan fácilmente el virus”.

Pero Palmero usa también tejidos más técnicos, avalados por laboratorios. La ecuación es la que sigue: tejido transpirable, TNT (filtro) y tejido ornamental, el que combina con el bolso o el vestido. “Son tres capas, pero así es” asegura Palmero, que se muestra sorprendida por la respuesta que ha obtenido por parte del público.