- Los visitantes que lleguen a Euskadi este año serán un diamante en bruto para atesorar. Tras la decisión de la Unión Europea de restringir la entrada por vía aérea en el espacio Schengen de los viajeros procedentes de todo el mundo, excepto de catorce países, las posibilidades para el sector turístico vasco se reducen todavía más.

Según los datos elaborados por el Observario Turístico de Euskadi pueden ser más de 250.000 los turistas que esperarán tiempos mejores para conocer las excelencias del País Vasco. Esta es la cifra, concretamente, 255.507, de visitantes que el pasado año se hospedaron en los hoteles vascos procedentes de los países no incluidos en la lista blanca publicada por Europa el martes. Destacan por su importancia para Euskadi, los que no vendrán sobre todo desde Estados Unidos, ya que suponen casi la mitad del total de estos países sin permiso. Son los viajeros más numerosos, en concreto, el año pasado pernoctaron 130.797, lo que supone auparse al quinto lugar como país emisor de visitantes en el País Vasco, teniendo por encima Catalunya, Euskadi, Madrid y Francia. Solo el país galo, con 271.122 visitantes, supera al estadounidense, que a su vez está por encima de Reino Unido y Alemania, los otros dos grandes países de donde el pasado año llegaron foráneos a conocer la comunidad autónoma vasca.

Destacan también Argentina y México, que generaron en 2019 casi 31.500 y poco más de 20.000 visitantes en los tres territorios, respectivamente, y que debido al actual estado negativo de su situación sanitaria este año apenas tendrán presencia en monumentos y tours turísticos.

En el ranking elaborado por el Observario Turístico de Euskadi se incluyen dos países para cuyos habitantes con pasaporte oficial les está permitida la entrada por los aeropuertos vascos, al igual que el resto de Europa. Son Japón y Australia, con casi 40.000 y 24.850 autóctonos, que el pasado año se sintieron atraídos por los encantos vascos, y que todavía pueden organizar una visita con acento euskaldún. Fuentes de Basketour, la Agencia Vasca de Turismo, no quisieron ayer valorar cómo va a afectar esta sangría de prohibiciones para las visitas que no tengan como origen los estados europeos. “No hacemos previsiones de visitantes pero es que además este año eso es algo imposible”, indicaron, con la certeza de que el primer semestre del año está tirado ya a la basura tras acumular un trimestre de prohibiciones para viajar y pandemia confinadora, y los dos primeros meses del ejercicio que son los que menos turismo generan en Euskadi.

Y en estas cuentas del observatorio, que incluyen aproximadamente el 80% de todos los visitantes, no se integran los viajeros con economías más apañadas. Los mochileros, autocaravanistas y turistas que buscan para hospedarse alternativas a los tradicionales hoteles. La caída de las fiestas patronales de las capitales vascas son también abono para menguar las listas de visitantes que vienen buscando experiencias concretas para visitar Euskadi.