- La consejera de Salud del Gobierno Vasco, Nekane Murga, alertó ayer del aumento de casos detectados entre menores de 20 años. Las cifras no se pueden “comparar claramente”, ya que durante el inicio de la pandemia “a las personas sin síntomas o a contactos estrechos no se les realizaba la prueba”. Es por ello que “muchas” de las personas jóvenes a las que ahora se les hace la PCR “están asintomáticas y les realizamos el análisis por convivir con algún positivo que hemos detectado”.

Aún así, admitió que parece ir en aumento el número de positivos y, de hecho, de los seis nuevos casos detectados en la última jornada, tres son menores de 20 años.

Murga explicó que, en relación a estos nuevos contagios detectados por el sistema de salud, “la mayoría de ellos son por contactos familiares y dentro del domicilio”, incluso en reuniones familiares.

A este respecto, se ha constatado que los contagios se han producido en encuentros “que no son excepcionales, sino una celebración familiar. En ocasiones, no se han visto durante semanas” y se sospecha que “esa falta de sensación de riesgo” es la que ha podido provocar los contagios.

Aún y todo, advirtió sobre la responsabilidad que se impone en el ámbito social, ya que, “aunque de momento no tenemos casos por este motivo, el riesgo sigue existiendo”. De hecho, admitió que le “preocupa mucho” las aglomeraciones que se puedan producir durante el verano. “Hemos visto lo que ha ocurrido en fiestas que han sido tanto al aire libre, como en sitios cerrados. Aunque sean espacios comunes, hay zonas por las que las personas pasan y existe esa proximidad. Por tanto, en Euskadi también tenemos que convivir con ese riesgo y estar vigilantes, teniendo en cuenta lo que ha ocurrido en otros sitios”, insistió la consejera. Precisamente, Murga alertó que “una transmisión no controlada entre muchas personas hace muy difícil el control de un foco”.

Recordó que hasta ahora los principales focos en Euskadi han sido en “círculos cerrados donde era fácil que la red de rastreo pudiera cortar rápidamente la transmisión. “Pero si un contagio se diera en una fiesta en la que interactúan personas que después no podemos localizar y que muchas de ellas serían asintomáticas, pondría en peligro al conjunto de un municipio, de un área o del conjunto del territorio histórico”, alertó. Es por ello que solicitó “responsabilidad” porque, tal y como remarcó la responsable del departamento de Salud del Gobierno Vasco, “nos jugamos la salud de nuestras personas próximas y mucho más”.

Por otro lado, la consejera recordó la importancia de adoptar medidas de seguridad en caso de necesitar asistencia en un centro de salud de la red de Atención Primaria para evitar riesgos de transmisión entre pacientes y profesionales sanitarios.

Por ello, recordó que, antes de acudir de manera presencial al centro de salud, es imprescindible llamar por teléfono.

Únicamente se puede acudir con cita previa y, siempre que sea posible, se debe acudir solo. Además, en todo momento es preciso utilizar la mascarilla y mantener la distancia de dos metros.

El uso de guantes no está recomendado y se facilitará el alcohol-gel para el lavado de manos en la entrada del centro de salud.

Del mismo modo, tal y como especificó Murga durante su comparecencia, en las visitas domiciliarias a los pacientes, sigue siendo necesario el uso de la mascarilla.

Además, la consejera solicitó que cuando se tenga cita presencial programada y se noten síntomas compatibles con COVID-19 (como tos, fiebre, o dificultades para respirar) los pacientes se pongan de nuevo en contacto telefónico con el centro de salud para que sea valorado.

En la misma línea, indicó que para garantizar la seguridad de pacientes y profesionales, los centros de salud se han reestructurado de forma que tienen “circuitos diferenciados para pacientes de covid y pacientes no COVID-19”, a los que, además, se atiende en franjas horarias diferentes.