- Basta con repasar el boletín diario sobre la evolución del coronavirus en Euskadi para comprobar que, efectivamente, se sigue “conviviendo con el virus”. El último parte habla de diez nuevos casos por COVID-19 en pruebas PCR y una persona fallecida. La consejera de Salud, Nekane Murga, actualizó ayer los datos estadísticos de una pandemia que desde su inicio ha causado en Euskadi 1.602 fallecidos y 20.539 casos positivos entre pruebas PCR y test rápidos. Murga precisó que las muertes que se recogen en el informe se corresponden con personas que han dado positivo en una prueba PCR en los últimos 60 días y “que han muerto ahora”, y no siempre la causa del fallecimiento de la persona tiene que ver directamente con el COVID-19.

De los últimos diez nuevos contagios, siete se contabilizaron en Bizkaia (cinco en Bilbao, uno en Barakaldo y otro más en Bermeo), dos en Araba y el otro en Gipuzkoa. Estos casos se confirmaron tras ser realizadas 4.377 pruebas, de ellas, la mayoría (3.971) PCR, que detectan si una persona tiene el virus en ese momento, a los que se suman otros 406 test rápidos.

La consejera detalló que en las UCI de los hospitales vascos permanecen ingresadas nueve personas por COVID-19 y que ayer recibió al alta médica el último paciente con coronavirus que estaba en la unidad de cuidados intensivos del Hospital de Santiago de la capital alavesa, que llevaba 78 días ingresado. Además, en las últimas 24 horas diez personas recibieron el alta hospitalaria y 39 habrían superado la enfermedad, por lo que ascienden a 13.486 los enfermos que se han recuperado.

Murga destacó que el análisis de los fallecimientos registrados en las últimas semanas ha demostrado que de las 38 muertes que se han producido desde el 1 de junio, el 47% fue por causas no directamente relacionadas con el COVID-19. Es decir, estas personas tuvieron coronavirus en los dos meses previos pero el motivo principal de su muerte “no fue el virus”, sino a una enfermedad de otro tipo.