- Aunque la comunidad educativa del colegio Jesuitas de Donostia estaba sobre aviso desde el jueves por la tarde, la noticia se expandió con rapidez en la ciudad en la mañana de ayer: un posible positivo de COVID-19 en uno de los alumnos del centro había obligado a la suspensión de las clases presenciales y a la activación del protocolo previsto ante esta posibilidad.

No tuvieron que pasar muchas horas para que la consejera de Sanidad del Gobierno Vasco, Nekane Murga, anunciara que las pruebas realizadas al joven habían dando resultado negativo. Un respiro tras los brotes registrados en los hospitales de Basurto y Txagorritxu.

"El centro ha actuado con gran celeridad", aseguraba ayer a este periódico la madre de una alumna de primero de Bachiller. Esta misma madre destacaba también el responsable proceder de los padres del alumno. "Cuando supieron que podía tener COVID-19 se pusieron en contacto con el colegio para que adoptara las medidas oportunas a la mayor brevedad posible", explicó.

Si el aviso se dio por la tarde, la circular que el centro envió a las familias vía email no tardó en llegar a primera hora de la noche. En dicha comunicación se informaba de que, tras tener conocimiento de la sospecha, Jesuitas había contactado con Osakidetza y del departamento vasco de Sanidad, que les informó de las medidas a adoptar.

Atendiendo a tales recomendaciones el centro decidió suspender las clases presenciales en 4º de la ESO y primero y segundo de Bachillerato, notificando a las familias de dichos alumnos la necesidad de ponerse en contacto con su médico de cabecera y de permanecer durante 14 días en cuarentena salvo que les fuera indicado lo contrario.

Según subrayó esta misma fuente, "la mayoría de los chavales no habían vuelto a clase" después de que dicha opción se hiciera factible, por lo que las medidas propuestas habrían afectado a algo más de una treintena de estudiantes y a sus familias.

"Con el curso casi acabado muchos escolares de cuarto de la ESO y primero de Bachiller no habían vuelto a clase y las seguían online porque previamente habíamos optado por la fórmula que preferíamos para nuestros hijos", añadió la madre de la alumna. "Otra cosa es los de 2º de Bachiller, que tienen que presentarse a la EAU y necesitan un empujón", constataba.

A media mañana se conocía que el resultado de la PCR realizada al alumno era negativo, por lo que se procedió a levantar la cuarentena al alumnado y las familias afectadas.

"Ante esta nueva situación dejan de estar en vigor las medidas adoptadas que incluían, entre otras cosas, la cuarentena de catorce días de las familias de los jóvenes que habían estado en contacto con el alumno", señaló el centro en un comunicado.

Pese a todo, Jesuitas decidió mantener la suspensión de clases presenciales en los tres niveles anteriormente citados y continuar con la formación de manera telemática.

"Queremos destacar que en todo momento hemos querido garantizar la salud y la seguridad de nuestra comunidad educativa", señalaron desde el colegio.

"La comunicación desde el centro ha sido rápida, tanto el jueves para notificar las medidas a adoptar como ayer, cuando el alumno dio negativo", apuntó la madre consultada.

Además, subrayó, la preocupación entre las familias ha sido menor dado que por la organización propia del centro el alumnado de los distintos niveles no tienen que compartir espacios. "En este caso, los de 2º de Bachiller no habían tenido contacto con los de 4º de la ESO y 1º de Bachiller", recordó.

"La comunicación desde el centro ha sido rápida tanto para adoptar las medidas como para comunicar que es negativo", declaró una madre