- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha decidido suspender "temporalmente" la inmigración al país norteamericano, aludiendo al "ataque" que supone la pandemia del coronavirus.

"A la luz del ataque del enemigo invisible, firmaré una orden ejecutiva para suspender temporalmente la inmigración a Estados Unidos", anunció ayer Trump a través de su cuenta de Twitter. Asimismo, justificó también que toma la decisión "para proteger los trabajos" de los "excelentes" ciudadanos estadounidenses. Por el momento, no ha proporcionado más detalles sobre la medida, como cuánto tiempo exactamente se extenderá la suspensión.

Desde que estalló la pandemia del coronavirus, Trump ha llevado a cabo varias acciones que persiguen el aislamiento del país. Así, a principios de febrero prohibió la entrada a territorio estadounidense a todos los extranjeros que hubieran estado en China en los últimos 14 días.

Posteriormente, en marzo, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) estadounidenses prohibió la entrada de los extranjeros que pudiesen ser considerados como un peligro para la salud pública. También en marzo, y sin previo aviso, Trump suspendió todos los viajes al país norteamericano desde la Europa continental.

En este sentido, el lunes, EEUU, Canadá y México acordaron ampliar un mes más las restricciones en sus respectivas fronteras, vigentes desde el 21 de marzo, que sólo permanecerán abiertas para viajes esenciales.

Es destacable el esfuerzo llevado a cabo por Trump para aislar a su país del resto en comparación con las laxas medidas que ha tomado su Administración intramuros para contener la pandemia del COVID-19.

A pesar de ser el país más golpeado por la pandemia, el presidente estadounidense ha sostenido desde el principio su negativa a ordenar un confinamiento a nivel nacional, en contra de los criterios de expertos y gobernadores de los estados.

Además, ha remarcado una y otra vez su inclinación a volver a tener el país en funcionamiento el 1 de mayo. Hasta ahora, Estados Unidos ha registrado 41.872 muertes por el COVID-19, mientras que los positivos sobrepasan los 787.000.

Asimismo, Trump ha atacado a los inmigrantes y a los fenómenos migratorios en múltiples ocasiones, sobre todo a los migrantes centroamericanos y latinoamericanos. De hecho, la promesa estrella que el presidente estadounidense realizó en su campaña electoral de 2016 fue la construcción de un muro entre Estados Unidos y México. Aún no la ha cumplido.

Trump ha criticado en repetidas ocasiones a El Salvador, Guatemala y Honduras por las caravanas de miles de sus ciudadanos que se dirigen hacia México para intentar cruzar la frontera con Estados Unidos.

El Ejecutivo estadounidense llegó a hablar de "invasión" y forzó a los países emisores y a México, país de tránsito, a firmar acuerdos migratorios para fortalecer las medidas contra la inmigración ilegal bajo amenaza de retirar su ayuda y de imponer aranceles comerciales.

Mientras, durante su mandato, su Administración ha dado pasos para recortar la inmigración y dificultarla, como las deportaciones masivas de millones de migrantes que se encuentran en la nación norteamericana de forma ilegal. También, el Gobierno estadounidense puso en marcha una reforma que permite que las familias inmigrantes puedan permanecer detenidas de manera indefinida.

Se estima que en EEUU hay 12 millones de inmigrantes indocumentados, llegados principalmente de México y Centroamérica. Las autoridades fronterizas estadounidenses confirmaron el 9 de abril de este año la deportación en la frontera mexicana de 6.300 inmigrantes indocumentados.

Entre 50.000 y 60.000. Donald Trump rebajó ayer la estimación de fallecimientos por coronavirus en el país norteamericano realizada por su Administración y vaticinó que morirán entre 50.000 y 60.000 personas. Según indicó a final de marzo el principal responsable científico en la lucha contra el coronavirus en Estados Unidos, Anthony Fauci, unas 100.000 personas morirían por el COVID-19 en el país. Hasta el momento, EEUU ha registrado un total de 41.872 víctimas mortales, según la Universidad Johns Hopkins. "Si no hubiéramos hecho lo que hemos hecho, habríamos tenido, creo, un millón de fallecidos, tal vez dos millones", dijo Trump.