- Los días previos a la Semana Santa suelen ser de importante trajín en los supermercados, donde la gente se afana por llenar la despensa para los días festivos. Sin embargo, este año, el estado de alerta y el obligado confinamiento nos plantean ante una Semana Santa inusual en todos los sentidos.

Por ello, las grandes cadenas de alimentación que operan en Euskadi descartan por el momento reforzar el servicio durante los días festivos, al considerar que no existe necesidad de hacerlo.

Así lo señalaron ayer a este periódico fuentes de Eroski, Mercadona y Uvesco (Super Amara y BM), que precisaron que mantendrán sus establecimientos cerrados, al igual que lo hacen el resto de días festivos del año.

Según explicaron, la compra en estas superficies se ha “normalizado mucho” en los últimos días y la situación nada tiene que ver con la semana previa a que se decretase el estado de alarma, cuando miles de ciudadanos acudieron en masa a los supermercados para aprovisionarse ante la situación que se avecinaba.

“Hemos detectado que las compras se han espaciado mucho en el tiempo y los comportamientos se han normalizado”, explican estas fuentes, que insisten en que, aunque en algunos momentos pueda haber una falta puntual de algún producto en las estanterías, “el abastecimiento está asegurado, tal y como se ha visto en las últimas semanas”.

Además, remarcaron que mientras otros años la compra por estas fechas se hace para pasar unos días de vacaciones, este año se hará “para estar en casa, solo o con la familia más próxima, por lo que las compras también bajarán”.