- El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, confirmó ayer a los presidentes autonómicos que el estado de alarma decretado a causa de la pandemia de coronavirus se prolongará en el Estado español otros quince días y llegará hasta el 11 de abril. Así, coincidirá de pleno con las vacaciones de Semana Santa: el 12 de abril es Domingo de Resurrección.

La prórroga del estado de alarma se votará en el Congreso este miércoles, día 25, y los distintos grupos parlamentarios podrán hacer propuestas para delimitar su alcance, según establece el artículo 6 de la ley de 1981 que regula los estados de alarma, excepción y sitio.

Sánchez comunicó la decisión del Ejecutivo en el inicio de su intervención en la segunda videoconferencia mantenida por el jefe del Estado y los cuatro ministros al mando de esta crisis con los presidentes de las comunidades y ciudades autónomas para tratar la crisis sanitaria.

Durante su rueda de prensa en la Moncloa, Sánchez justificó la prórroga del estado de alarma en que se avecina una "ola muy dura" y días "muy difíciles" que pondrán "al límite" la capacidad sanitaria y moral de la sociedad. Señaló que esta medida es imprescindible para contener la propagación del coronavirus y está convencido de que todos los partidos entenderán que esta es una situación de emergencia y apoyarán la autorización. "Os pido responsabilidad y disciplina", dijo Sánchez a los ciudadanos en esta comparecencia, en la que reconoció que es una medida "drástica" que ocasiona muchas incomodidades a los ciudadanos, pero que es fundamental para vencer a la enfermedad.

Sánchez volvió a insistir en que esta crisis "no va de territorios, ideologías o de partidos" sino de "ganarle la partida al virus". Explicó que había pedido a los presidentes autonómicos lo mismo que les promete, "coordinación, colaboración y solidaridad", como les recalcó también que "no cabe el egoísmo" ahora. "No nos jugamos la reputación ni ningún titular", reiteró y abogó por "no perder el tiempo" ni malgastarlo con "matices irrelevantes o absurdas sospechas".

Sánchez aseguró ser consciente de los efectos "psicológicos" que tienen estas restricciones y por ello envió un mensaje de ánimo y "profundo agradecimiento" a los ciudadanos. "Los sacrificios de hoy serán los beneficios de mañana -recordó-. Cuanto mayor es el reto, mayor debe ser la ambición". Y esta batalla cree que debe librarse desde la unidad y la capacidad de cooperación entre todas las instituciones y formaciones políticas. "Generosidad, civismo, sentido de estado y enorme potencial institucional", destacó entre las cualidades que están "sacando lo mejor de España".

Sánchez instó, además, a la Unión Europea a coordinar esfuerzos contra la pandemia y pidió "la mayor movilización de recursos económicos y materiales de la historia": "Europa está en guerra contra el coronavirus y tenemos que responder con todas nuestras armas". "No hay excusa que valga para no movilizar todos esos recursos", subrayó.

Mientras Sánchez volvió a dar cifras del material que espera España en los próximos días y recordó lo duro que está siendo adquirirlo en un mercado internacional cada vez más "agresivo" por la extensión de la pandemia en todo el mundo. Por su parte, la mayoría de los presidentes autonómicos exigió al jefe del Ejecutivo que les mande cuanto antes más material sanitario para hacer frente a la crisis del coronavirus y los test necesarios para diagnosticar la enfermedad.

El presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, explicó que la Xunta mantiene los procesos de compra de material sanitario iniciados antes de la declaración del estado de alarma debido -indicó- a la falta de suministro de estos enseres por parte del Estado en las últimas jornadas. El presidente andaluz, Juanma Moreno, pidió los tests pero también un reparto "más ágil y efectivo" del material sanitario, así como el cierre de los puertos y aeropuertos, salvo para mercancías, con un control "estricto" en la verja de Gibraltar.

Los más críticos. La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, reclamó a Sánchez que no bloquee el envío que la Comunidad va a recibir. Explicó que Madrid espera dos aviones con material comprado en mercados internacionales y el primero traerá 300 respiradores y ventiladores y 140.000 muestras, mascarillas y batas. "Lo que le pido (a Sánchez) es que se comprometan a que, una vez que el material esté aquí, nos garanticen que no habrá problemas", explicó. Añadió que sería una "dejación de funciones" quedarse con los brazos cruzados en vez de seguir con la compra. Por su parte, el president catalán, Quim Torra, aparcó su hostilidad, pero pidió más restricciones a los desplazamientos. "Ningún reproche, al lado tendiendo la mano", afirmó Torra, que siguió defendiendo el "confinamiento total", en el que solo se permita el desplazamiento para trabajo de sectores sanitarios, alimentación y otros esenciales.

"Europa está en guerra contra el coronavirus y tenemos que responder con todas nuestras armas"

Presidente del Gobierno español