La Nevera Solidaria, una vía para frenar el despilfarro

La propuesta, que echó a andar en Galdakao el 29 de abril de 2015 con la colocación de la primera nevera, consiguió evitar en el primer mes de prueba que 200 kilos de comida acabaran en el vertedero. La fórmula rápidamente se ha exportado a otros puntos del mapa: en el caso de Gipuzkoa a Donostia (tercera planta de Tabakalera) o Lasarte-Oria (en el exterior de la casa de cultura Manuel Lekuona), pero también a Gasteiz, Leioa (Bizkaia) y otros tantos lugares del Estado, más allá de Madrid y Barcelona.

La Nevera Solidaria es una propuesta con la que se busca reducir el despilfarro de alimentos, siempre con la premisa de que en ese frigorífico se deposite comida en buen estado, ya sea cocinada o no, y siempre envasada.

Este programa tiene dos protagonistas principales: los que aportan los alimentos, que pueden ser ciudadanos a título individual, comercios o empresas; y quienes aprovechan la comida que encuentran en el interior de la nevera.

¿Cómo funciona? De forma muy sencilla. Se instala una nevera accesible en la que a cualquier hora y cualquier día se pueden depositar los excedentes alimentarios. Las personas que necesiten esta comida podrán ir a buscarla allí. Pero además de poner alimentos a disposición de las personas que los necesitan, Nevera Solidaria busca trabajar en la concienciación, en la necesidad de actuar sobre el despilfarro de comida.

alimentos en condiciones A esta nevera se pueden llevar alimentos preparados o envasados, deben estar enteros y ser consumibles. En el caso de que estén cocinados, se deben dejar en recipientes transparentes, especificando cuándo se han hecho. No se puede llevar ni carne picada cruda ni productos elaborados con huevos crudos y se debe evitar romper la cadena de frío más de media hora.

En cada lugar en el que se coloca una nevera hay una organización que asume su gestión y que se encarga de controlar su correcto funcionamiento. - A.L.