PAMPLONa - El niño Daniel Pérez Pascual, de 5 años, falleció en la madrugada del sábado en el Complejo Hospitalario de Navarra (CHN) al no haberse podido recuperar de las terribles lesiones que le causó la embestida de un autobús de La Estellesa que, fuera de control, arrolló el vehículo que conducía su madre, de 41 años, que se encuentra en la UCI estable dentro de la gravedad, y en el que también viajaba su hermana mayor, Ixeya, de 8 años, y que murió en el acto. Las localidades navarras de Lizarra, en cuyo juzgado número 1 trabaja el padre, José Ramón, como funcionario; Arroniz, cuna familiar de la madre, Yoana Pascual; y Aiegi, lugar de residencia de toda la familia, son municipios sumidos en el shock más profundo.
Han declarado tres días de luto oficial, las banderas ondean a media asta, pero el duelo durará ya toda la vida en ese punto céntrico de la ciudad del Ega.
La tragedia es infinita para una familia que se encontró de bruces con una fatalidad: un autocar que con gran velocidad, debido a la inercia alcanzada en la calle de descenso de Aiegi y que conecta con el acceso a Lizarra, se quedó al parecer sin frenos, según recuerdan varios testigos que oyeron gritar al conductor que se agarraran adonde fuera porque no podía detener el vehículo. El autocar salió desbocado de la rotonda anexa al lugar del siniestro.
El conductor, M.L.R., de 36 años y vecino de Pamplona, y que resultó ileso, no pudo enderezar el rumbo y acabó llevándose por delante el Kia Carens de la familia de Aiegi, en el que viajaban la madre y sus dos hijos.
El vehículo lo estrelló contra la parte trasera de la gasolinera de Vélaz y en un trayecto descontrolado de unos 50 metros acabó también hiriendo de gravedad a una peatona, E.G.S.M., de 34 años y vecina de Lizarra, que sufre la rotura de ambas piernas y está ingresada en Traumatología del CHN.
Un joven de Alloz de 17 años también resultó policontusionado y fue trasladado al hospital estellés. El autocar golpeó en total a siete vehículos hasta que se detuvo. La Brigada de Atestados e Investigación de la Policía Foral investiga las causas del siniestro y remitirá la información al juzgado, pero por todos los datos facilitados por los testigos existe coincidencia en señalar que el autobús pudo sufrir algún fallo mecánico que afectó a su sistema de frenos.
vecinos de aiegi En Aiegi, ayer, los padres de los compañeros de Ixeya y Daniel formaron un grupo apiñados en mitad del silencio de la plaza del ayuntamiento. Todo el mundo recordaba su último encuentro con ellos: Ohiana, el último rato en la ludoteca con Daniel; Txema, la última clase de natación de Ixeya... Con todo, el comentario general era el de pensar en la madre: Yoana. Así lo hizo el alcalde, Leo Camaces, al reconocer que “se involucra en todos los actos que se organizan en el ayuntamiento”.
Algo que confirma su vecina María Jesús Gambra, “amiga, vecina y que también es de mi pueblo, Arroniz, desde que vino a Aiegi me hizo muy feliz”. Mari Sol Aguinaga es otra vecina que mantenía contacto permanente con Yoana y sus hijos. A punto estuvo de bajar con ellos la tarde del viernes a Lizarra. Recuerda a Yoana como “cercana, amable, sensata; si tienes un problema ella te lo resuelve y no se entera nadie. Es única”.
oncineda: la sonrisa de Ixeya Ixeya jugaba a baloncesto en el equipo benjamín del club Oncineda, cuyo coordinador, Rubén Lorente, recordaba que su veintena de compañeros de equipo están “consternados y muy tristes. Para nosotros era una estrella, por la sonrisa que traía todos los días a los entrenamientos”. Los equipos de benjamín de Oncineda aplazaron sus partidos de este fin de semana y el resto de conjuntos del club realizó un minuto de silencio en señal de duelo.
