Una delegación del Ayuntamiento de Donostia, a la que se suma NOTICIAS DE GIPUZKOA, viajó ayer hacia los territorios palestinos ocupados para conocer in situ y durante una semana la situación en la que vive la población civil bajo ocupación militar. De la mano de la ONG Sodepaz, que lleva más de dos décadas organizando desplazamientos de turismo responsable a Palestina, representantes del PNV, EH Bildu, Unidas Podemos y PSE conforman la comisión de observación que tomará buena nota de la vulneración de derechos reconocidos por la propia ONU que se vienen produciendo bajo todos los gobiernos israelíes desde 1967.

La comitiva visitará algunos de los puntos calientes en los que se ha ido acelerando la colonización en los últimos años. Un proceso impulsado por el primer ministro Netanyahu y su aliado en Washington, el presidente Donald Trump, que ha modificado su política regional a favor de Israel, al reconocer a Jerusalén como capital del Estado hebreo y cortando los fondos destinados a los palestinos. La muerte el viernes en un ataque aéreo estadounidense del militar más poderoso de Irán no ha hecho más que agudizar la escalada de tensiones en Oriente Próximo.

La delegación vasca, a la que se suma la Fundación Paz y Solidaridad Euskadi, mantendrá contacto con las principales organizaciones solidarias que trabajan para garantizar, entre otros, el acceso a la sanidad en enclaves como Beit Sahour, pueblo palestino al este de la ciudad de Belén donde la ONG Sodepaz trabaja desde hace muchos años con la Health Work Commitees (HWC). Se trata de una organización local que brinda servicios médicos a la población sometida, con especial atención a los más pobres y discriminados.

Las limitaciones de movimientos de los palestinos, que no siempre tienen permiso para acudir a los hospitales, hacen complicado garantizar el derecho a la salud en Cisjordania, por lo que resulta crucial la ayuda de emergencia, con distribución de medicinas y clínicas móviles. Existe en la zona un proyecto financiado por el Ayuntamiento de Donostia.

La delegación de observación se desplazará también a Hebrón, la segunda ciudad más grande de la Cisjordania ocupada, la única urbe palestina en cuyo centro se ubica un asentamiento judío. Sus antiguos moradores viven bajo un severo régimen de segregación y ven muy limitados sus movimientos.

Está prevista la visita al campo de refugiados de Aida Camp, a dos kilómetros al norte de Belén, y a Jerusalén Este, enclave particularmente delicado y objeto de disputa al asentarse en él diferentes relatos históricos religiosos. Colonias ilegales, carreteras bloqueadas... Es el escenario que dejará atrás la delegación para conocer también de cerca las condiciones de vida en otras ciudades palestinas como Nablús, Haifa o Ramala, así como las de las comunidades beduinas del valle del Jordán.

Sodepaz lleva más de 20 años organizando viajes de turismo responsable a Palestina, de la mano de la ONG palestina Alternative Information Center (ATG), ubicada en Belén. Mediante estos viajes de una semana de duración se conciencia a las viajeras de las constantes violaciones de Derechos Humanos que padece la población palestina desde el año 1948, con especial énfasis en las consecuencias de vivir bajo una ocupación militar israelí.

Sodepaz considera estos viajes como la más potente herramienta de concienciación y formación para las personas que participan en ellos. Un 35% del total de personas del Estado español que ha viajado a Palestina en las dos últimas décadas procede de Euskal Herria. La ONG considera que de esta forma se contribuye a aumentar la conciencia crítica de la sociedad vasca sobre la ocupación, siendo los propios integrantes de la expedición el mejor altavoz para conseguirlo.