- En un nuevo intento por aglutinar al sector posconvergente que se desligó de Junts, Àngels Chacón lanzará el próximo enero un nuevo partido liderado por el PDeCAT y que aglutinará a la mayoría de siglas satélites de este espacio que quedó muy fragmentado tras desaparecer la antigua Convergència. Aunque no se tratará de una suma de formaciones, estará configurado por la actual militancia de la fuerza que abandera Chacón -que no obtuvo representación en las últimas elecciones al Parlament pero que sí cuenta con cuatro diputados en el Congreso y con un importante peso municipalista- e integrantes de siglas minoritarias como Lliures, la Lliga Democràtica y Convergents, así como del Partit Nacionalista de Catalunya de Marta Pascal. El PDeCAT permanecerá pero su identidad será más que nada un formalismo.

Sin fijar la independencia como condición aunque no sea un objetivo irrenunciable, su orientación estará dirigida al rechazo a las políticas progresistas, el apoyo a la iniciativa privada en educación y sanidad, la defensa de los intereses empresariales y un planteamiento crítico con ciertos postulados ecologistas. Cabe recordar que el PDeCAT ya mostró su oposición al giro, a su juicio, izquierdista que dio Junts y a una entrada de la CUP en el Govern de Pere Aragonès. Lo que perseguirá este nuevo partido es dotar a Catalunya de las máximas cotas de autogobierno a través de una reforma constitucional. De hecho, esta formación incluiría a personas claramente contrarias a la secesión, como es el caso del dirigente de Lliures y exconseller Antoni Fernández Teixidó, y a independentistas que teóricamente no han dejado de serlo como la propia Chacón.

Según El Periódico de Catalunya, a la hora de concurrir a las urnas, esta marca podría aprovechar los derechos electorales del PDeCAT, lo que le permitiría disponer de espacios gratuitos de propaganda electoral. Ello obligaría a la formación a concurrir legalmente en forma de coalición con el PDeCAT.

La atomización del espacio posconvergente tras el divorcio con Junts por la estrategia de Carles Puigdemont ha sido una constante. Además de Chacón, una figura que representa bien este tránsito es la de la líder del PNC, Marta Pascal, que empezó dirigiendo las juventudes convergentes para tomar después la batuta de la

posconvergencia de la mano de Puigdemont y Artur Mas. Internamente mostró su oposición a la línea emprendida tras el 1-O y quedó defenestrada en JxCat, además de no estar dispuesta a una reagrupación de todas estas siglas.

Chacón encabezará una propuesta de centro que tendrá como principal dogma de cabecera el pactismo que siempre caracterizó a la extinta Convergència.