- El autogobierno y el Concierto Económico vasco vivieron ayer una jornada clave de la que salieron fortalecidos con la celebración de la Comisión Mixta del Concierto Económico, donde se acordó que las diputaciones de la CAV pasen a recaudar tres figuras impositivas (impuestos sobre transacciones financieras, servicios digitales y el IVA del comercio electrónico) que pueden suponer en el caso de las dos primeras una recaudación anual en Euskadi cercana a los 220 millones de euros. Al mismo tiempo, en este foro se acordaron las tasas de referencia de déficit y deuda para 2022, que permitirán diseñar unos presupuestos “expansivos con fuerte inversión pública”, de cara “a salir cuanto antes de esta crisis económica y lograr la transformación socioeconómica que Euskadi necesita”. Así lo afirmó el consejero de Economía y Hacienda del Gobierno Vasco, Pedro Azpiazu, que encabezó la delegación vasca en la reunión en Madrid con la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

El acuerdo contempla la concertación de tres figuras impositivas que estaban pendientes, de manera que las haciendas de Gipuzkoa, Bizkaia, y Araba -cuyos diputados generales, Markel Olano, Unai Rementeria y Ramiro González, respectivamente, estuvieron presentes en la reunión- comenzarán a recaudarlas como “haciendas integrales reconocidas, acorde a lo establecido en el Concierto Económico”. Según destacó Azpiazu, el acuerdo es coherente con el sistema tributario internacional, que establece que “se tribute allí donde se genera el valor”.

Frente al impuesto sobre transacciones financieras y el de la tasa Google, con una recaudación anual para las haciendas forales estimada en 220 millones, el IVA del comercio electrónico es un régimen nuevo a nivel europeo, y por lo tanto, todavía no es posible avanzar una valoración del impacto que pueda tener en la recaudación.

También conocido como IVA OSS, Azpiazu recordó que en la Comisión Mixta del Concierto Económico de marzo de 2020 se produjo un “avance sustancial”, ya que se acordó el punto de conexión que habilitaba a las haciendas forales para que sus propios contribuyentes pudieran ingresar las cuotas de IVA del comercio electrónico en sus respectivas haciendas, sin tener que ingresarlo a la Agencia Tributaria.

Azpiazu, que estuvo acompañado por la consejera de Gobernanza Pública y Autogobierno, Olatz Garamendi, y por la viceconsejera de Hacienda, Itziar Agirre, subrayó que ayer se dio “un paso más”, y se alcanzaron los acuerdos para la modificación del Concierto Económico respecto a la concertación en el IVA. También para el intercambio de información y de los flujos financieros entre Euskadi y el Estado, de cara a cumplir la directiva europea.

La clave estará, por tanto, en el punto de conexión, el domicilio social y el lugar desde el que actúa el usuario. Azpiazu puso como ejemplo que si un consumidor en Alemania compra una bicicleta a una empresa vasca a través de su tienda online, esa compañía de Euskadi ingresará en la hacienda foral que le corresponda el IVA que ha repercutido al cliente de acuerdo al tipo de IVA vigente en Alemania. El mismo será transferido a Alemania por la hacienda foral vasca.

En el caso contrario, cuando un consumidor situado en la CAV adquiere una bicicleta a una empresa alemana a través de internet, será la empresa germana la que ingresará en la hacienda alemana el IVA que ha repercutido al cliente de acuerdo al tipo de IVA vigente en el territorio que corresponda y ese impuesto corresponderá a ese territorio por ser el de consumo.

Pero la Comisión Mixta tenía otros importantes puntos del día, y así en su transcurso se acordaron las tasas de referencia de déficit y deuda para 2022. En concreto, en el caso del Gobierno Vasco se fijó una tasa de referencia del déficit del 0,9% para 2022 (707 millones de euros) y para las diputaciones forales del 0,2% (157 millones). En cuanto a la deuda, se estableció el 15,6%, un objetivo que sitúa el límite de endeudamiento de Lakua en 12.255 millones.

Estos acuerdos, fruto del “esfuerzo negociador por parte de ambos equipos”, se sustanciaron en una Comisión Mixta que se convocó justo a tiempo para que el lehendakari Urkullu decidiera finalmente acudir a la Conferencia de Presidentes autonómicos prevista hoy en Salamanca. No en vano, el encuentro de ayer supuso reactivar la relación bilateral entre las dos administraciones, que según Azpiazu “ha de ser la norma general de funcionamiento entre las instituciones vascas y la administración general del Estado”.

En la rueda de prensa posterior al encuentro, el consejero de Economía y Hacienda añadió que los acuerdos rubricados ayer en Madrid “son parte de lo que ha de ser la normalidad en la relación fiscal y financiera entre el Gobierno de España y las instituciones vascas”, en el ámbito del régimen especial de financiación, sustentado en la Ley del Concierto Económico.

“Hoy Euskadi ha dado un paso más en su autogobierno, nuestras Diputaciones consiguen avanzar y crecer en autonomía fiscal y todas las instituciones vascas contaremos con unos presupuestos en 2022 que redundarán en el crecimiento económico y recuperación del empleo en Euskadi”, resumió.

Agradeció el esfuerzo de todos para poder alcanzar este pacto, “clave para continuar fortaleciendo el autogobierno y el Concierto Económico vasco”. Azpiazu subrayó que estos acuerdos deben integrar “la forma de hacer que debe darse entre las administraciones, con naturalidad y sintiéndonos cómodos”. “Soy consciente de que en las negociaciones de cuestiones económicas siempre se da cierta tensión, y por ello quiero poner en valor el esfuerzo negociador que se ha realizado por ambos equipos”, sentenció.

Impuesto sobre transacciones financieras (ITF) o ‘tasa Tobin’. Es un tributo de naturaleza indirecta que grava las adquisiciones de acciones de compañías cotizadas cuyo valor bursátil exceda los 1.000 millones. El punto de conexión para la recaudación del ITF será el domicilio social de las empresas cuyas acciones se adquieren.

Impuesto sobre determinados servicios digitales (IDSD) o ‘tasa Google’. Grava con un 3% los servicios digitales de publicidad en línea, de intermediación en línea y de transmisión de datos”, el acuerdo establece como punto de conexión el lugar donde se sitúe el usuario que participa en dichos servicios.

IVA del Comercio Electrónico (IVA OSS). Consiste en que la empresa ingresa en su hacienda el importe correspondiente al tipo del IVA del país en el que se encuentre el consumidor. Posteriormente, han de producirse los intercambios de información y de flujos financieros entre las haciendas de los Estados miembro de forma que el IVA quede ingresado en el país en el que se ha producido el consumo.

“Euskadi ha dado un paso más en su autogobierno y las Diputaciones crecen en autonomía fiscal”

Consejero de Economía y Hacienda