Las asociaciones memorialistas de Euskal Herria integradas en la red Memoria Osoa han convocado este lunes a la ciudadanía a participar en una protesta, el martes 1 de junio a mediodía en la plaza de los Fueros de Vitoria-Gasteiz, para denunciar el "planteamiento discriminatorio" del Centro Nacional para la Memoria de las Víctimas del Terrorismo que se inaugurará en esta misma jornada a escasos metros, en la antigua sede del Banco de España de la capital alavesa.

Bajo el lema Memoria osoa bizikidetzaren alde, no a la discriminación entre vulneraciones de derechos humanos, representantes de la red Memoria Osoa, que reclama una memoria integral que incluya todas las vulneraciones de derechos humanos, considera que este memorial "supone un ataque a la convivencia porque su visión excluyente deja fuera a miles de víctimas de la violencia ejercida por los aparatos del Estado".

Memoria Osoa se presentó el 10 de diciembre de 2020 con el objetivo de manifestar la necesidad de trabajar la memoria y las vulneraciones de derechos humanos ocurridas durante los años de conflicto desde un punto de vista integral y no discriminatorio.

Esta plataforma subraya que "dicho centro toma como referencia para organizar los contenidos a los que da cabida 1960, una fecha absolutamente aleatoria en mitad de la dictadura franquista que no se corresponde con la realidad del mapa del sufrimiento provocado antes y después por el terrorismo de Estado en sus múltiples expresiones: fusilamientos, ejecuciones extrajudiciales o tortura".

A juicio de los convocantes, "necesitamos proyectos y dinámicas constructivas, integrales, que contemplen todas las vulneraciones de Derechos Humanos", y "hoy nos encontramos ante un centro que aborda nuestra memoria colectiva de forma fragmentada, basándose en la exclusión de una gran parte de esa realidad de violencia".

Señalan en ese sentido que el memorial "se contrapone al espíritu y vocación que la sociedad vasca desde su pluralidad ha manifestado en torno al proceso de construcción de la convivencia; una convivencia que ha de pivotar sobre el respeto al sufrimiento padecido por todas y todos, al compromiso con los derechos humanos de todas las personas sin exclusiones y a la memoria de todo lo ocurrido como garante de la no repetición".