- El Ejército español no ofreció el viernes la imagen de eficiencia que ha puesto en valor el Gobierno de Sánchez en los últimos tiempos. Unas maniobras de adiestramiento en Castro Urdiales terminaron en un auténtico fiasco por el clima adverso, que puso en serios aprietos a la Unidad de Pontoneros N°12 del Ejército de Tierra que se encontraba realizando prácticas. El muelle flotante instalado fue arrastrado por el oleaje.

Durante un ejercicio de adiestramiento que se estaba desarrollando el viernes, una de las plataformas que se estaban instalando se soltó por las fuertes olas dañando algunas embarcaciones, de las que el regimiento perdió el control y dejó a la deriva tras evacuarlas. Los militares tuvieron que ser evacuados pero no hubo daños personales, tras algunas informaciones que apuntaban lo contrario en primera instancia.

El Ejército tenía previsto trabajar del 15 al 23 de marzo en Castro Urdiales en adiestrar a una organización Operativa de Ingenieros en el montaje y manejo de un muelle flotante que permitiera el atraque de un barco que transporte a las tropas junto con su materiales y medios, y realizar operaciones portuarias sobre él. El Regimiento de Pontoneros 12, encuadrado en el Mando de Ingenieros del Ejército de Tierra, es un regimiento capaz de proporcionar a las Fuerzas Armadas capacidades operativas propias de ingenieros, algunas únicas, que le permiten dar soluciones a problemas complejos.

Un centenar de efectivos participaba en el montaje, que acabó en un auténtico enredo con varias embarcaciones encalladas y el desalojo de los militares de la zona.