- La exdirigente de ETA Marixol Iparragirre negó ayer en el juicio en la Audiencia Nacional que ordenara el atentado contra el cuartel de la Policía en Oviedo en 1997 y manifestó que entró en ETA "porque no tenía otra solución".

El fiscal pide que sea condenada a 71 años de prisión por haber ordenado el referido atentado de Oviedo, cometido con lanzamiento de granadas por los ya condenados por estos hechos Kepa Arronategi y Eneko Gogeaskoetxea. Iparragirre fue detenida en Francia en 2004 y los tribunales franceses la condenaron a veinte años de cárcel tras considerarla responsable de los denominados comandos legales.

Iparragirre manifestó que se trasladó a Francia porque no quería volver a sufrir los malos tratos que recibió tras haber sido detenida en una primera ocasión en su domicilio familiar junto con su madre y sus hermanos. Añadió que en esa época "comenzó la represión del Gobierno francés" y en ese contexto "o te mataba el GAL o te cogía la Policía francesa y te ponía en manos de la Policía española". "Tenía claro que no me iban a pillar y entré en ETA porque no tenía otra solución", recalcó ante los jueces.