- Mientras Sánchez y Ayuso escenificaban un periodo de distensión entre ambos gobiernos, Pablo Echenique, portavoz de Unidas Podemos -socio del PSOE en el Gobierno español- abría un nuevo frente al Ejecutivo y cargaba contra Ayuso y, por extensión, contra el Gobierno de la comunidad, al que acusó de “criminalizar a la gente trabajadora y a los migrantes” al solicitar “más presencia policial” para atajar posibles problemas de seguridad generados por la crisis del covid.
Así lo trasladó en un comentario en Twitter tras la reunión entre Sánchez y Ayuso, y en el que adjuntaba unas declaraciones de la dirigente madrileña tras la comparecencia conjunta. Concretamente, Echenique enlaza un vídeo de la intervención de Ayuso en rueda de prensa en el que alude a que el COVID-19 trae aparejado problemas relativos a la okupación, la delincuencia o los menores extranjeros no acompañados y que se podría abordar con el refuerzo la presencia de Policía y Guardia Civil. Echenique recriminó que el Gobierno madrileño “ha regalado el dinero de los rastreadores y la Atención Primaria a sus amigos millonarios”. “Y ahora pide más policía para criminalizar a la gente trabajadora y a las personas migrantes. PP y Ciudadanos gobiernan gracias a la ultraderecha y eso se nota”, ha manifestó aludiendo a Vox, que apoyó la investidura de Ayuso.
No fue solo Echenique quien cargó contra Díaz Ayuso ya que Mónica García, líder regional de Más Madrid en la comunidad, acusó al Gobierno español de “blanquear” el “ensañamiento” de la Comunidad de Madrid con los barrios populares al apoyar su plan de restricciones por zonas sin tener “solidez epidemiológica”. En declaraciones remitidas a los medios, García tachó de “decepcionante” el encuentro entre Sánchez y Ayuso. “Nos alegramos de que por fin se haya producido esta reunión, aunque desde hace semanas llevamos solicitando al Gobierno de España que nos dejara solos ante la ineptitud de Ayuso. Ojalá hubiera llegado antes y no llegara en un momento tan crítico”, señaló la dirigente de Más Madrid para quien es “sorprendente y preocupante” que Pedro Sánchez “haya dado el visto bueno a un plan insuficiente, estigmatizante e ineficaz”.
