- El Congreso de los Diputados ha cerrado las puertas a indagar en la verdad completa del GAL, la organización nacida en las cloacas del Estado español para combatir a ETA y que se cobró la vida de 27 personas y provocó decenas de heridos. No hubo margen a la sorpresa y la iniciativa avalada por los partidos abertzales e independentistas catalanes para promover una comisión de investigación tras la revelación de un informe de la CIA que señala a Felipe González como el creador de la organización terrorista no pasó el filtro de la Mesa el Congreso. PSOE, PP y Vox tumbaron la propuesta.

Para los principales partidos españoles, el GAL es una cosa juzgada y amortizada. El relato de lo ocurrido en Euskadi en lo que al terrorismo de Estado se refiere ya está escrito. Ayer, lo expresó mejor que nadie la ministra de Defensa Margarita Robles, que en su día investigó el secuestro de Lasa y Zabala, cuando fue preguntada por este asunto: “España necesita en este momento unidad, tenemos una tarea por delante de reconstrucción de este país, y eso pasa por mirar al futuro, porque al pasado hay que mirar para aquello que nos sirva para no cometer errores”.

La decisión se adoptó por la mayoría de la Mesa en contra del criterio de los servicios jurídicos de la Cámara que no habían puesto pegas al debate de la propuesta. La Mesa también rechazó las peticiones de comparecencia registradas por EH Bildu para que dieran explicaciones sobre el mismo asunto en sede parlamentaria tanto Felipe González como el actual ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska.

En este caso, los letrados del Congreso sí habían apostado por rechazar estas solicitudes, alegando que el Congreso no puede controlar a González puesto que ya no está en el Gobierno y que Marlaska no tenía por qué responder de asuntos que tuvieron lugar 25 años de que él entrara en el Ejecutivo. Eso sí, en la documentación que enviaron a la Mesa los servicios jurídicos apuntaban que no habría problema para que ambos fueran citados ante una comisión de investigación.

Unidas Podemos también se desmarcó de sus socios socialistas en este punto puesto que votó a favor de tramitar ambas comparecencias. Inicialmente, los de Pablo Iglesias mostraron su incomodidad con la comisión de investigación, por su alianza con los socialistas en el gobierno español. Tras las duras críticas que recibieron por parte de Pili Zabala, hermana de Joxean Lasa, una de las víctimas del GAL, rectificaron y ayer materializaron su apoyo. El secretario primero de la Mesa y diputado de En Comú, Gerardo Pisarello, explicó que, según el acuerdo suscrito por ambas formaciones, este es uno de los temas en los que tienen “autonomía de decisión”.

A diferencia del PSOE, su formación cree que, aunque algunos de los crímenes de los GAL ya se juzgaron, otros no llegaron a los tribunales y no se depuraron “suficientes” responsabilidades políticas. Por eso, subrayó que el Congreso no puede servir para “proteger la opacidad de nadie, se llame Felipe González o Juan Carlos de Borbón” y aseguró que removerán todos los obstáculos jurídicos para que pueda hacerlo. “No vamos a cejar en el empeño”, prometió.

Los socialistas, tanto desde el partido como desde el Gobierno salieron en defensa de su histórico líder. Adriana Lastra admitió que su grupo vetó la tramitación de la comisión de investigación, en contra del criterio de los letrados, porque tiene “una posición política” al respecto: que la Cámara no tiene por qué investigar asuntos que ya fueron “investigados, juzgados y sentenciados hace más de 20 años”. En línea parecida, la portavoz del ejecutivo, dio por juzgado el ‘caso GAL’ y mostró su “orgullo” por Felipe González.

Para la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua, la Mesa de la cámara optó por un “veto político”, puesto que la comisión contaba con el visto bueno de los letrados de la Cámara. Anunció que su formación no se va a quedar de “brazos cruzados” ante esta “grave” decisión y avanzó que van solicitar que comparezcan en el Congreso cuatro altos cargos de los Gobiernos de González --dos de ellos condenados por los GAL- y el exmagistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, quien instruyó algunas de las causas sobre el terrorismo de Estado. En concreto, va a intentar que el Congreso cite a los exministros del Interior José Barrionuevo, José Luis Corcuera y Juan Alberto Belloch, así como al exsecretario de Estado de Seguridad con el primero de ellos, Rafael Vera, condenado con su superior por el secuestro de Segundo Marey.

Por su parte, el portavoz del PNV, Aitor Esteban, firmante de la iniciativa, insistió en que hay “razones suficientes” para que el Congreso abra esa investigación y criticó que ni siquiera se permita su debate por “cortesía parlamentaria”, aunque después del Pleno frene la creación de la comisión.

Desde la derecha y la extrema derecha, Ciudadanos y Vox, interpretaron el deseo de esclarecer la verdad de los GAL como un intento de “erosionar” la transición española.

“El Congreso no puede servir a la opacidad de nadie, se llame González o Juan Carlos de Borbón”

Secretario de la mesa por U-Podemos

“Esto es un veto político. La niciativa tenía el visto bueno de los letrados de la cámara”

Portavoz de EH Bildu

“Lo digo desde la legitimidad de haber luchado contra ello, hay que mirar al futuro”

Ministra de Defensa