- El Jubileo de Platino de Isabel II terminó ayer con un saludo de la reina desde el balcón del palacio de Buckingham y un desfile callejero en Londres, en el que más de 10.000 voluntarios reflejaron con música y disfraces de todo tipo los momentos más relevantes de los últimos 70 años. El momento más destacado lo marcó Isabel II al salir al balcón con los futuros monarcas británicos: el príncipe Carlos y heredero de la corona, el duque de Cambridge y el príncipe Jorge, en una clara muestra de la continuidad de la línea sucesoria.

Poco antes, Ed Sheeran se subió al escenario montado frente al palacio para cantar Perfect, como tributo a la reina y su marido, el fallecido duque de Edimburgo, mientras se mostraban por las pantallas gigantes imágenes de la pareja real.

En presencia de miles de espectadores y de miembros de la familia real, militares, músicos, bailarines, vehículos antiguos, autobuses de dos pisos y celebridades tomaron parte de esta fiesta, que resaltó la profunda transformación que experimentó el Reino Unido desde el ascenso de Isabel II al trono el 6 de febrero de 1952.

Esta fiesta callejera, que transcurrió sobre la avenida de The Mall y ante el palacio de Buckingham, arrancó con el paso de la dorada y ostentosa carroza de Estado, que no había sido vista en veinte años y que transportó a Isabel II cuando fue coronada en la Abadía de Westminster en 1953.

Los músicos de los distintos regimientos de las fuerzas armadas, con tambores, gaitas escocesas y trompetas, se unieron primero a esta fiesta, en la que destacó la Guardia Real, con sus uniformes rojos, que portaron las banderas de los países de la Commonwealth.

El desfile transcurrió en una avenida engalanada con banderas británicas, delante del palco real, donde estuvo el príncipe Carlos, en representación de su madre, así como los duques de Cambridge, Guillermo y Catalina, con sus tres hijos -los príncipes Jorge, Carlota y Luis-; el primer ministro británico, Boris Johnson, y el líder de la oposición laborista.