Juana Ruiz Sánchez, la trabajadora humanitaria detenida hace más de tres semanas por Israel, fue acusada hoy formalmente de cinco cargos, entre ellos, "pertenencia a organización ilegal" y, de momento, seguirá en prisión.

Su abogada confirmó a Efe que la fiscalía militar imputó hoy a Ruiz Sánchez, de 62 años y detenida el pasado 13 de abril, y que el próximo lunes se celebrará una nueva audiencia, la séptima, en la que la defensa pedirá su liberación mientras transcurra el juicio.

Israel acusó hoy a los Comités de Trabajos para la Salud, donde Ruiz Sánchez trabaja desde hace décadas, de desviar fondos europeos a la actividad del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), considerado grupo terrorista por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea.