Las fuerzas de seguridad de Guatemala detuvieron y reprimieron violentamente ayer a una caravana migrante compuesta por miles de hondureños, que pretenden llegar a México y después a Estados Unidos en busca del sueño americano. Los migrantes fueron atacados con palos y con bombas lacrimógenas por miembros del Ejército cuando intentaban avanzar por una carretera en la que permanecían desde el sábado. En la foto, soldados y policías golpean a los migrantes en Chiquimula (Guatemala).