- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo ayer que nominará a una nueva juez para el Tribunal Supremo este viernes o sábado, y que redujo su lista de candidatas a cinco, aunque no las identificó. Durante una entrevista telefónica con la cadena televisiva Fox News, Trump explicó que quiere esperar “por respeto” a que concluyan los funerales de la jueza Ruth Bader Ginsburg, fallecida el pasado viernes a los 87 años, para anunciar quién quiere que la sustituya. No obstante, la decisión de Trump de nominar de inmediato a una sustituta de Ginsburg ha generado polémica, porque la veterana jueza progresista dejó escrito, antes de morir, que su “deseo más ferviente” era “no ser reemplazada hasta que haya un nuevo presidente”, tras los comicios.

Trump ya había adelantado que planeaba nominar a su candidata esta semana y que sería una mujer, y su decisión de retrasar el anuncio hasta el fin de semana reduce todavía más el calendario para confirmarla en el Senado antes de las elecciones del 3 de noviembre.

Hace cuatro años, cuando otra muerte dejó una vacante en el Supremo, el líder de la mayoría republicana del Senado, Mitch McConnell, ignoró al sustituto que había elegido el entonces presidente Barack Obama y ni siquiera programó una votación al respecto, con el argumento de que no tenía sentido aprobarlo en un año electoral.

Sin embargo, esta vez McConnell sí se ha comprometido a someter a voto a la candidata que seleccione Trump y, para confirmarla, necesitaría una mayoría simple, por lo que los republicanos pueden permitirse perder hasta tres de los 53 escaños que ocupan en el Senado. El mandatario añadió: “Está bien elegirlas jóvenes, porque así están mucho tiempo” en ese cargo vitalicio.

La favorita en la lista de Trump es Amy Coney Barrett, una magistrada conservadora de apenas 48 años; seguida de la cubano-estadounidense Bárbara Lagoa, de 52; y de Allison Jones Rushing, de solo 38; además de una abogada de la Casa Blanca, Kate Todd, según fuentes cercanas al proceso de selección citadas por The New York Times. Todas ellas se ajustan supuestamente a los criterios que Trump ha asegurado buscar en una jueza, con el objetivo de ganarse el favor y los votos de la derecha cristiana: la oposición al aborto y la defensa férrea del derecho a portar armas.

Detenida en la frontera con Canadá. Las autoridades estadounidenses detuvieron este domingo a una mujer sospechosa de enviar a Donald Trump un sobre que contenía veneno de ricina, que colapsa el sistema circulatorio provocando la muerte. El paquete fue interceptado por personal especializado que inspecciona previamente todas las cartas que llegan a la Casa Blanca. La acusada fue localizada en un cruce fronterizo en el estado de Nueva York cuando pretendía ingresar a Estados Unidos desde Canadá. La mujer portaba un arma, según informó un policía en declaraciones para la cadena estadounidense CNN.