Madrid/Donostia - La veintena de ciudadanos con pasaporte español, que se encuentra en la ciudad china de Wuhan, epicentro del brote del coronavirus, llegarán "en breve" a Madrid y serán posteriormente trasladados hasta el Hospital Gómez Ulla, donde pasarán un periodo de cuarentena de catorce días, el periodo máximo de incubación del virus. Así lo anunció ayer el ministro de Sanidad, Salvador Illa, en una rueda de prensa que tuvo lugar después de reunirse con la Comisión de Sanidad Pública, en las que están los directores generales de Salud Pública, y con representantes de las sociedades científicas a los que detalló cómo será el dispositivo para la llegada de los repatriados. Sanidad tiene un dispositivo específico para que la llegada de los repatriados se produzca con "las máximas garantías para ellos y los ciudadanos". "Y por ello vamos a adoptar todas las precauciones, evitando al máximo cualquier riesgo", dijo Illa, quien aseguró que se intentará que su estancia "sea lo más llevadera posible, garantizando el contacto con familiares y personas próximas", y "con libertad de movimiento" dentro del área de cuarentena.

La consejera vasca de Salud, Nekane Murga, afirmó ayer que, aunque es algo que corresponde confirmar a Acción Exterior, un trabajador vasco de CIE Automotive podría estar entre la veintena de personas que serán evacuadas desde Wuhan hasta Madrid. Allí, según explicó, "se tomarán las medidas sanitarias necesarias" por el coronavirus tanto a este ciudadano vasco como "al resto de personas del Estado" que serán trasladadas desde China en breve.

"Son personas sanas" El director del Centro de Emergencias y Alertas de Sanidad, Fernando Simón, incidió en que "estamos hablando de personas sanas, no estamos repatriando ningún caso de coronavirus", y aseguró que la probabilidad de contagio de esta veintena de repatriados es "muy pequeña" por lo que en su estancia en el hospital podrán recibir visitas, con las debidas medidas de protección. Simón insistió en que estos casos no suponen "ningún riesgo", en que "no es necesario su aislamiento" y que no suponen una situación excepcional y de alto riesgo, "porque todos los días se ponen a pacientes en cuarentena en España por distintas enfermedades".

A los repatriados les recibirá personal de Sanidad Exterior. A las puertas del avión, este personal recibirá los informes de las autoridades chinas sobre su estado y se les hará una evaluación antes de partir de China y otra a su llegada a Madrid.

A la tripulación del vuelo se les hará un seguimiento por teléfono y se deberán tomar la temperatura diariamente. Simón puntualizó que la tripulación, no obstante, no va a tener contacto directo con su pasaje. En opinión de los representantes de Sanidad, se ha creado un "temor infundado" por este brote, con foco en China y del que no se ha registrado ningún caso en el Estado y por eso han instado a "no caer en falsos alarmismos".

Illa y Simón hicieron un llamamiento a la tranquilidad y pidieron que se confíe en el sistema de salud, y dijo, ante el aumento de las ventas de mascarillas en las farmacias, que "a día de hoy es un acción un poco infundada". Prueba de ello es que la mortalidad de este coronavirus se sitúa en el 2,2%, mucho menor que la de otros dos coronavirus, la del MERS (30%) y el SARS (12%). "No estamos en la misma situación", aseguró Simón. - Efe