Kabul - Los talibanes se atribuyeron el derribo ayer de un avión estadounidense que hacía labores de inteligencia en el este de Afganistán, matando a todas las personas a bordo, y aunque las fuerzas de Estados Unidos reconocieron más tarde el siniestro, se desvincularon de la versión del ataque. El avión se estrelló a primera hora de la tarde en un área controlada por los talibanes en la provincia afgana de Ghazni.

En un principio las autoridades afganas aseguraron que se trataba de un avión comercial de una aerolínea local, aunque esa hipótesis pronto fue perdiendo fuerza a medida que las compañías lo negaban al tiempo que llegaban imágenes del siniestro, que apuntaban a un aparato estadounidense, algo que finalmente confirmó Washington. "Un bombardero de EEUU E-11A se estrelló hoy en la provincia de Ghazni (...) Mientras las causas de la colisión están siendo investigadas, no hay indicios de que la colisión se debiera a fuego enemigo", aseguró en su cuenta de Twitter el portavoz de las fuerzas estadounidenses en Afganistán, Sonny Leggett. A continuación el oficial estadounidense tachó las afirmaciones talibanes de "falsas".

El portavoz talibán Zabihullah Mujahid había reivindicado antes en un comunicado el derribo del avión de las Fuerzas Armadas estadounidenses, desmintiendo también esas primeras versiones oficiales que apuntaban a que se trataba de un vuelo comercial. "Un avión perteneciente a las fuerzas invasoras americanas fue derribado en la provincia de Ghazni y varios oficiales de alto rango estadounidenses murieron en él", aseguró el portavoz talibán.

Según Mujahid, se trataba de un vuelo en "misión de inteligencia" y "todos los tripulantes del avión y los oficiales de la CIA (Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos) a bordo murieron", al tiempo que aseguró que "los restos del aparato y los cadáveres de los tripulantes están en la zona" del impacto. - Efe