"Todo lo que ha pasado es muy positivo, es muy grande y espero que la afición de la Real, que estará fastidiada, esté tan orgullosa como estoy yo". Imanol Alguacil era la imagen viva de la lógica mezcla de sentimientos al término de la semifinal de la Supercopa ante el Barcelona. Y con derrota: "Dije que éramos favoritos y lo hemos demostrado. Creo que hemos hecho un partido enorme ofensiva y defensivamente. Creo que los amantes del fútbol habrán disfrutado del partido y eso habla muy bien de la Real, del club y de la cantera".

Lejos de darse por satisfecho por competir la semifinal e incluso merecer pasarla, el entrenador ha insistido en varias ocasiones en que el objetivo era alcanzar la final: "Esto ayuda a crecer sabiendo que estamos fastidiados, porque el objetivo era pasar a la final y no hemos podido". Entiende que la experiencia servirá: "Sin duda. Es cierto que es una derrota, porque ya dijimos que éramos favoritos y que queríamos ir a la final. Hoy se ha visto claro, pero esta derrota es para nosotros como una victoria".

El entrenador realista ha reconocido que la eliminación es "una pena, pero estoy muy orgulloso y muy contento del partidazo que hemos visto. Espero que nuestra afición también esté orgullosa. Ha sido un gran partido por ambos equipos, e incluso si hacia el final alguien merecía ganar, éramos nosotros, pero no hemos acertado y después, los penaltis".

Sobre el partido, Imanol no ha querido quedarse solo con la prórroga en la que su equipo se ha hecho acreedor del pase: "Quisiera subrayar la primera parte que hemos hecho, presionando a veces arriba; otras veces, más atrás, en líneas generales ha sido un partidazo, con gran ritmo y calidad frente a un Barcelona. El equipo ha hecho tantas cosas bien que ha merecido otro premio".

El entrenador de la Real ha mostrado su pena por los jugadores y la afición: "Estoy con pena por los jugadores sobre todo, porque llegar a un momento así, con esa tensión... Es una pena, sin duda también por la afición, porque el pase estaba ahí. El mérito ha sido de su portero, que ha parado dos... A los jugadores solo puedo agradecerles y felicitarles, porque tanto lo que hicieron el año pasado y están haciendo este año es grande, y es para ensalzarlo".

La emoción estaba a flor de piel tras el partido: "Mucha gente estaba en el vestuario llorando, pero es normal, porque sentimos así esta camiseta. Es normal que Mikel (Oyarzabal) estuviera hundido y seguramente, a la vez, muy contento. Michos compañeros estaban así. Para mí es un orgullo pertenecer a esta Real".

Varios de los periodistas que han intervenido en la rueda de prensa telemática han felicitado a Imanol, que no ha llorado tras el choque por poco: "Casi, porque lo siento igual que lo sentís vosotros", les ha dicho a los informadores: "Sé, porque os conozco, que a vosotros poco os habrá faltado para llorar. Sé que estaréis orgullosos, aunque se agradece que lo digáis. Siendo el entrenador del equipo y viendo competir no solo hoy, solo tengo palabras de elogio hacia los jugadores y la afición por todo el respeto que nos muestran".

El revés de la Supercopa no va a desviar a Imanol un ápice de la ruta que tiene marcada para esta temporada y si sus respuestas acostumbran a sonar a convincentes, una esta noche ha sonado aún más: "El fútbol nos debe una y este año. No va a ser por no trabajar, no insistir, no creérnoslo y no defender esta camiseta por toda la afición que tenemos detrás, por vosotros y por nuestros jugadores. Vamos a darle la vuelta a esto. Tenemos que estar muy pero que muy tranquilos, con la cabeza alta. Si seguimos dando pasos, el fútbol nos debe una y estoy convencido de que este año lo vamos a conseguir".

Oyarzabal, palabra de capitán

Antes que Imanol ha comparecido el capitán, Mikel Oyarzabal, en la sala de prensa del Nuevo Arcángel de Córdoba, que fiel a su carácter ganador, apenas ha querido entrar en debates sobre si la eliminación era injusta: "Justo o injusto... Eso no importa. Importa que no estamos en la final y que nos hubiera gustado. No hay que darle más vueltas. A todo el mundo le hubiera gustado que la cosa nos hubiera ido a favor, pero no es el momento. Ahora es momento de estar unidos. Todos remábamos hacia lo mismo y es momento para aprender. Nos va a servir a muchos. Quieras o no somos un equipo joven y las cosas se aprenden según pasan. Estoy orgulloso del equipo y lo que hemos hecho".

Preguntado por cómo se sentía, Oyarzabal se ha encogido de hombros: "Contento no estoy, qué voy a decir, pero esto es fútbol y aquí el penalti lo falla el que lo tira. Los cinco que íbamos a tirar estábamos convencidos de que lo íbamos a meter. Luego hay mil cosas que pueden pasar. Es momento de estar orgullosos del equipo con el partido que hemos hecho ante el Barcelona".

"Es cuestión de que pasen días", ha explicado Oyarzabal sobre el trago amargo de la eliminación: "Analizaremos, seguro que habrá cosas para corregir, pero habrá otras para estar orgulloso de ellas. Al equipo le servirá para aprender, seguir creciendo y seguir mejorando".

Los tópicos y los lugares comunes son sitios incómodos, más en la derrota. Oyarzabal ha concedido que el error en la tanda de penaltis ha podido ser el peor momento de su carrera. inmaculada desde los once metros, pero mira firme adelante: "No le voy a dar más vueltas. Si mañana tengo otra tanda de penaltis, voy a tirarlo y si tenemos otro partido contra el Barcelona, haremos lo que hemos hecho hoy. Estaremos más o menos acertados, pero hemos dado la cara en todo momento, hemos plantado cara al Barcelona, hemos tenido ocasiones para ganar, aciertos, errores... Esto es fútbol. Nos ha tocado perder, pero no cambiaría nada".

En la retirada a los vestuarios, el cuerpo técnico ha hecho un pasillo de honor a los futbolistas, gesto que Oyarzabal ha agradecido: "Para mí, la Real y todo lo que rodea la Real es como una familia. Todo el que viene aquí lo siente igual. Todo el mundo trabaja por lo mismo. Cuando uno sufre todos sufren y todo el mundo se siente arropado. No sé gracias a qué tenemos un staff que trabaja día y noche, que se preocupan por nosotros todo el día y que pase lo que pase fuera van a estar ayudándonos siempre. Es algo para estar orgulloso. En ese momento se agradece que la gente esté contigo, porque es un momento difícil, pero orgulloso de lo que hemos hecho, de ser de este equipo, de la Real y de ser de la Real".